"Esto es música para nuestros oídos". Así definieron los obreros y los técnicos del gobierno al ruido que se siente en la Central Hidroeléctrica de Ullum producto del proceso de generación de energía eléctrica. El clima de celebración fue porque desde hace dos años no se producía energía en la Quebrada de Ullum. En el medio, además de la sequía hubo un reacondicionamiento de toda la maquinaria. La puesta a punto se ejecutó en Mendoza, en IMPSA. "Tenemos maquinaria por 30 años más", añadió el secretario del Agua y Energía, Ramiro Cascón.
En febrero del 2021 la Quebrada Hidroeléctrica salió de servicio. Arrancó un proceso de desmontaje de la maquinaria después de tres décadas de funcionamiento continuo. Las piezas de la sala de máquinas fueron trasladadas a Mendoza, a la empresa IMPSA, donde se les hizo un "service" completo. "Se actualizó y se modernizó el sistema con reguladores de velocidad. Tenemos nuevamente generación en Ullum con una turbina y un equipamiento modernizado, puesto a punto para trabajar 30 años más", detalló Cascón.
En IMPSA se hicieron los trabajos de modernización, justamente la misma empresa que fabricó la turbina de Ullum. No son muchas las empresas en Argentina que tengan la capacidad de ingeniería que tiene IMPSA, por eso se decidió que las tareas de mejoramiento se desarrollen allí. Los procesos son largos, con ingeniería y equipamiento muy costoso. "La turbina se reconvirtió, se modernizó. Llevaron varios meses las labores y las pruebas también llevaron varios meses porque hablamos de equipamiento que tiene que durar 30 años más, son garantías y procedimientos que tienen que seguir el manual de procedimiento", explicó el funcionario. En las pruebas se va variando el caudal, se hacen pruebas de rechazo, se sube gradualmente por minutos el caudal a más del doble del que está erogando actualmente -38 metros cúbicos por segundo- para chequear el funcionamiento.
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El presidente del EPSE, Juan Carlos Caparros, indicó que el plan de modernización de la maquinaria incluyó dejar a nuevo el rodete, que ya tenía fisuras; al rotor de generación se le han incorporado partes nuevas y al equipo de comunicación, que antes era mecánico se lo acondicionó y está todo digitalizado, lo que permite controlar el funcionamiento con variables más precisas.
Después de dos años, finalmente la Central Hidroeléctrica de Ullum volvió a generar energía y a inyectarla al Sistema Interconectado Nacional. No será por muchos, calculan que será por cinco días, por el escaso caudal de agua destinado para riego. En el resto de los diques, tampoco hubo generación porque están jaqueados por la sequía que está atravesando la provincia. "En este momento se está generando con el mismo caudal que se entrega a riego, 38 metros cúbicos por segundo se entregan desde el dique de Ullum, pasan por la usina de generación y se devuelve al río ya habiendo generado energía", añadió Cascón.
En el medio de la alegría, no se dejó de mencionar el sinsabor que genera la poca agua que trae el río. Ahora para riego se están erogando 38 metros cúbicos por segundo mientras que el río trae 28 metros cúbicos, esos 10 metros cúbicos extras salen del almacenamiento de los diques. Por la sequía no se puede sostener durante mucho tiempo este ritmo de erogación de agua pero seguirá la generación eléctrica en Punta Negra y en La Olla.