Una declaración radial reavivó la interna peronista en Caucete. La intendenta Romina Rosas anticipó que no buscará la reelección en la Junta Departamental, sino que intentará conducir el Partido Justicialista de San Juan. Generó malestar en la dirigencia caucetera. Disparó las críticas de la excandidata a la Intendencia, Sonia Recabarren, que se alzó como segunda fuerza en el distrito. Es más, la dirigente anunció: "Estoy dispuesta" a conducir la estructura departamental.
El sábado, en una entrevista en Radio Sarmiento, Rosas sorprendió con una decisión sobre su futuro al frente de la Junta de Caucete: "Creo que mi construcción allí ya terminó". La definición tiene sentido en tren de sus aspiraciones de presidir el Consejo Provincial Justicialista. Voces en off la criticaron duramente: "Primero tiene que solucionar los problemas de Caucete", dijeron algunos pares del peronismo.
Con el anuncio de Rosas, se rompe la tradición justicialista que dicta que el intendente debe ser el presidente de Junta Departamental. Con ese terreno -teóricamente- allanado, este diario consultó a la exdirectora de la Residencia Eva Perón, Sonia Recabarren. La mujer jugó fuerte por la Intendencia y logró ingresar dos ediles al Concejo Deliberante. La dirigente dijo que actualmente "no estamos participando de la Junta" porque las críticas "no son respetadas".
Recabarren tiene una larga trayectoria en el peronismo sanjuanino. De hecho, es integrante del Congreso Justicialista que fijó las elecciones partidarias para el 11 de agosto, a excepción que se plieguen al calendario nacional. La exfuncionaria de Sergio Uñac comentó que en ese ámbito "escucho a todos los sectores que no estamos contenidos en la Junta". En ese sentido, marcó que "sería una oportunidad importante" competir por la Junta. "Estoy dispuesta", aseguró.
También opinó sobre la expectativa de Rosas de conducir el justicialismo sanjuanino: "Me parece mucho. Hay que fortalecer Caucete. Las internas nos dejaron muy heridos". Asimismo, marcó su postura ante el tembladeral institucional que vive Caucete, donde la intendenta no tiene mayoría en el Deliberante. "Nosotros no somos oposición. Nos tildaron de traidores. Pero la realidad es que los concejales cumplen con su función de contralor. No hay que ser obsecuentes".
Por su parte, el histórico Emilio Mendoza dijo que Rosas "con nosotros no se ha comunicado" y recordó su experiencia: "He sido justicialista toda la vida". No obstante, dejó abierta la puerta a una conducción provincial de Rosas: "Cuando uno tiene vocación, la tiene que manifestar".