Tras una sesión maratónica que se extendió hasta la madrugada de este jueves, la Cámara de Diputados aprobó en general el proyecto de Ley de Presupuesto 2026 impulsado por el Gobierno nacional. La iniciativa obtuvo 132 votos afirmativos, 97 negativos y 17 abstenciones, y fue girada al Senado. Sin embargo, el oficialismo sufrió un revés clave: no consiguió sostener el artículo que buscaba derogar las leyes de emergencia en Discapacidad y de financiamiento universitario.
El traspié se produjo durante la votación en particular del capítulo XI, que incluía el controvertido artículo 75, incorporado a último momento por el oficialismo. Ese apartado fue rechazado por 123 votos contra 117 y dos abstenciones, lo que generó festejos en toda la oposición y dejó fuera del texto final una serie de modificaciones sensibles.
De ese modo, el Presupuesto avanzó al Senado sin el capítulo que también contenía la restricción al régimen de zona fría, la eliminación de la actualización automática de la Asignación Universal por Hijo, por Embarazo y de las asignaciones familiares, así como disposiciones vinculadas al reclamo de la Ciudad de Buenos Aires por coparticipación y la transferencia de fondos al Consejo de la Magistratura por 21.347 millones de pesos. Todas esas medidas quedaron sin efecto al haber sido incluidas dentro del capítulo rechazado.
En la votación en general, La Libertad Avanza logró articular una mayoría junto a sus aliados del PRO, la UCR, Innovación Federal y bloques provinciales. Unión por la Patria y el Frente de Izquierda votaron en contra, mientras que Provincias Unidas optó por la abstención.
La estrategia oficialista de agrupar múltiples reformas en un solo capítulo desató fuertes críticas. Desde la oposición acusaron al Gobierno de intentar condicionar a los legisladores a respaldar un paquete cerrado, sin posibilidad de pronunciarse artículo por artículo. “Es una extorsión”, denunció el diputado Maximiliano Ferraro (Coalición Cívica), mientras que el jefe del bloque de Unión por la Patria, Germán Martínez, calificó la maniobra como una “perversidad” y cuestionó el intento de blindar el artículo 75 mediante la inclusión de otros temas sensibles.
El debate derivó en cruces ásperos dentro del recinto. Legisladores de distintos bloques advirtieron que muchos diputados se vieron forzados a votar a favor de un capítulo que incluía normas que rechazaban públicamente. Incluso aliados habituales del oficialismo, como la radical Karina Banfi, marcaron distancia y denunciaron el carácter “extorsivo” del mecanismo de votación.
Pese a la polémica, el oficialismo celebró la aprobación en general del Presupuesto. En el cierre del debate, el jefe del bloque de La Libertad Avanza, Gabriel Bornoroni, defendió el proyecto y destacó el equilibrio fiscal como eje central de la propuesta económica del presidente Javier Milei. “Es la piedra angular del modelo”, sostuvo, y afirmó que el Presupuesto permitirá avanzar hacia “un país con futuro y prosperidad”.
Ahora, el debate continuará en el Senado, donde el Gobierno buscará convertir en ley el Presupuesto sin las reformas que no logró sostener en Diputados.
Con información de NA