En un país -y una provincia como San Juan, gran productora de vino-, las cifras del comercio electrónico sorprenden: solo el 1,56% de las ventas nacionales se realizan por internet, mientras el Ecommerce ya representa el 15% del comercio tital en la Argentina.
Mientras En 2024, las bodegas argentinas facturaron casi $12.000 millones en canales digitales, un salto del 237% interanual, pero todavía una porción mínima si se la compara con otros rubros.
Los datos surgen del Estudio Anual de Comercio Electrónico en la Industria Vitivinícola, elaborado por Combinatoria junto al Observatorio Vitivinícola Argentino y la Cámara Argentina de Comercio Electrónico (CACE).
El vino, en versión online
En tiempos donde todo se compra con un clic, el vino todavía parece resistirse a digitalizarse del todo. Aun así, los números muestran un avance: las ventas online crecieron un 15% respecto al año anterior, en un contexto general de caída del consumo.
Durante 2024, 35 bodegas argentinas con venta online participaron del relevamiento. De ellas, 18 concentran el 91% del total vendido por internet, lo que muestra que el negocio aún se encuentra en manos de los grandes jugadores del sector.
En total, se registraron 126.491 órdenes de compra y se vendieron 1.070.586 litros de vino, el equivalente a 237.908 cajas de seis botellas. El ticket promedio fue de $94.505, con un promedio de 11 botellas por pedido, una tendencia que indica que los consumidores aprovechan los descuentos y envíos para abastecerse más que para comprar una sola etiqueta.
Qué se compra y quién compra
El informe también da pistas sobre los gustos. El 76% de las compras fueron de vinos tintos, y dentro de ese segmento, el Malbec concentra el 42% de las ventas.
En cuanto al perfil del comprador digital, el 69% son hombres y el 60% tiene más de 45 años, un dato que contrasta con la idea de que el ecommerce es terreno joven.
Uno de los mayores obstáculos para las bodegas sigue siendo el costo logístico: representa el 15,4% del valor total de facturación online, y casi el 98% de ese costo lo absorben las propias bodegas. Aun así, 6 de cada 10 compradores eligen la entrega a domicilio como forma de envío. Para incentivar las ventas, las bodegas aplicaron descuentos promedio del 20% y casi la mitad de las compras se pagaron en cuotas.
Cómo juega San Juan en el tablero digital
Aunque el estudio no desagrega datos por provincia, San Juan -segunda productora de vinos del país y con una fuerte presencia en el mercado del mosto y las pasas- aparece con mucho potencial en este nuevo escenario.
Algunas bodegas locales ya experimentan con plataformas propias, ventas a través de redes sociales y marketplaces especializados, pero el crecimiento todavía es incipiente.
Es que aquí el sector históricamente está asociado a una experiencia presencial –catas, degustaciones, turismos, ferias- y el desafío para las bodegas sanjuaninas será impulsar la pasión por el vino al comercio digital.