Un pasacalle con letras rojas y azules cuelga en plena intersección de calle Libertador y avenida Rioja, en el corazón de la Capital sanjuanina. La protagonista del escrache es María Denise Robles Bonade, una empresaria que está siendo investigada por una serie de estafas millonarias vinculadas a un emprendimiento inmobiliario que dejó a decenas de familias sin casa y con deudas impagables.
En el cartel, que fue colgado este lunes a plena luz del día, se puede leer con claridad: “María Denisse Robles ESTAFADORA. Jueces, fiscales, padres, cómplices”. La pancarta apunta directamente contra la mujer, pero también critica con dureza a las autoridades judiciales y al entorno de la acusada.
WhatsApp Image 2025-08-26 at 19.53.11
Robles Bonade y su socio —y presunta pareja— Rubén Ángel Martín González, fueron detenidos hace un mes y estaban alojados en el Penal de Chimbas. Ambos son investigados por una compleja trama de estafas que involucraría su firma "Anhelo", una empresa dedicada a la supuesta construcción de viviendas.
Según detalló la fiscalía, Robles Bonade enfrenta 59 denuncias por Defraudación por Fraude, 6 por Desbaratamiento de Derechos Adquiridos y 1 por Estelionato, mientras que González está acusado de 53 hechos de Defraudación y 8 por Desbaratamiento de Derechos. Aunque la fiscalía sostiene que eran pareja y actuaban en conjunto, González negó el vínculo sentimental y dijo haber sido engañado por Robles Bonade.
Una de las denuncias más resonantes es la de la familia Aubone, que asegura haber sido embaucada con más de 37 millones de pesos. Según la presentación judicial, firmaron un contrato por un departamento en calle Entre Ríos, en Concepción, y entregaron un auto 0 km valuado en $26 millones, $6 millones en efectivo y siete cuotas de $500.000.
Pese a la gravedad de las acusaciones, ambos imputados recibieron prisión domiciliaria por tres meses, por lo que dejaron el Penal de Chimbas para continuar el proceso desde sus domicilios.
El caso ha generado fuerte indignación pública, especialmente entre quienes aseguran haber sido víctimas de la estafa. El pasacalle que apareció este lunes no es más que una muestra del hartazgo de los damnificados, que reclaman justicia y visibilización frente a un proceso judicial que, para ellos, avanza a paso lento.