El presidente Javier Milei firmará este martes el decreto que habilita la actualización de los salarios de los funcionarios nacionales, luego de un extenso período de congelamiento. Según fuentes oficiales, la norma será publicada el viernes 2 de enero en el Boletín Oficial y alcanzará a los principales cargos del Poder Ejecutivo, desde la Presidencia hasta las subsecretarías.
En la Casa Rosada aseguran que la recomposición contemplará el tiempo acumulado sin incrementos, aunque subrayan que no habrá un trato diferencial respecto de los aumentos otorgados a los empleados estatales en el marco de las paritarias vigentes, según informó TN. La redacción final del decreto está siendo ajustada por los equipos de la Secretaría Legal y Técnica, a cargo de María Ibarzabal.
Desde el Gobierno sostienen que los salarios jerárquicos registraron una fuerte pérdida del poder adquisitivo desde el inicio de la actual gestión, en un contexto marcado por una inflación acumulada del 117,8% durante 2024 y un IPC que, con los últimos datos disponibles, suma 27,9% en 2025 hasta noviembre.
Actualmente, el esquema salarial establece haberes brutos mensuales de alrededor de $4 millones para el presidente, $3,7 millones para la vicepresidenta, $3,58 millones para los ministros, $3,2 millones para los secretarios y $2,8 millones para los subsecretarios. En el Congreso, en tanto, los diputados perciben ingresos cercanos a los $7 millones y los senadores alrededor de $9,5 millones.
Las negociaciones paritarias del Sistema Nacional de Empleo Público (SINEP), acordadas con la Unión del Personal Civil de la Nación (UPCN), incluyeron durante 2024 y 2025 una serie de incrementos escalonados y sumas fijas. En 2024 se aplicaron subas mensuales de entre 1% y 3,5%, junto con un adicional de $60.000, mientras que en 2025 se dispusieron ajustes de entre 1,1% y 1,3% entre junio y noviembre.
Durante el último año, la cuestión salarial generó tensiones dentro del gabinete, con reclamos elevados directamente al Presidente para avanzar con la firma del decreto. En el oficialismo admiten que la decisión de postergar la medida estuvo vinculada al calendario electoral de octubre y que el compromiso fue oficializarla a partir de enero.
En el Ejecutivo argumentan que el congelamiento impactó en el funcionamiento interno del Gobierno, especialmente en la conformación y retención de equipos técnicos. Señalan que la brecha con el sector privado se amplió en los últimos dos años, lo que dificultó la cobertura de cargos estratégicos en áreas clave.
Según indicaron fuentes oficiales, el cierre del decreto se concretó con la participación de la secretaria General de la Presidencia, Karina Milei; el jefe de Gabinete, Manuel Adorni; y los ministros Luis Caputo (Economía) y Federico Sturzenegger (Desregulación). El antecedente más reciente de un intento de aumento salarial para el gabinete terminó con la marcha atrás de la medida y la salida de un funcionario, un episodio que el Gobierno buscó evitar en esta ocasión.