El presidente de Francia, Emmanuel Macron, anunció este lunes el reconocimiento oficial del Estado de Palestina durante la inauguración de una "conferencia internacional por la solución de los dos Estados (Israel y Palestina)" en la ONU. La declaración de Macron, recibida con aplausos en la Asamblea General, marca un punto de inflexión en la diplomacia occidental y se produce en un contexto de intensa ofensiva israelí en Gaza y amenazas de represalias coloniales.
La decisión de Francia es de una importancia particular, dado que el país es históricamente uno de los aliados más fieles de Israel, alberga la mayor comunidad judía de Europa, y posee derecho de veto en el Consejo de Seguridad de la ONU.
El Gesto Político y la Búsqueda de la Solución de Dos Estados
El reconocimiento, si bien es considerado básicamente simbólico, ha sido impulsado por Francia con la esperanza de dar un mayor impulso a la solución de dos Estados. Macron enfatizó que la medida busca afirmar la dignidad y las "sólidas raíces históricas" del pueblo palestino.
El mandatario francés justificó la decisión como una estrategia para aislar al movimiento islamista Hamás. Argumentó que si no se ofrece a los palestinos una perspectiva política y el debido reconocimiento, estos “quedarán atrapados con Hamas como única solución”. Subrayó que este reconocimiento representa una "derrota para Hamás, al igual que para todos aquellos que fomentan el antisemitismo y alimentan las obsesiones antisionistas y que quieren la destrucción del Estado de Israel". Francia insistió en que el reconocimiento de los derechos legítimos palestinos no resta derechos al pueblo de Israel.
El reconocimiento se alinea con la base del proceso de paz que se originó con los Acuerdos de Oslo de 1993, aunque este proceso ha enfrentado una fuerte resistencia y ha quedado prácticamente estancado.
La ola de reconocimiento Internacional
El paso dado por Francia se suma al de otros aliados occidentales de Israel, marcando un cambio diplomático. Un día antes del anuncio francés, países como el Reino Unido, Canadá, Australia y Portugal ya habían reconocido al Estado palestino.
La presidencia francesa indicó que se esperaba que otros países formalizaran el reconocimiento el lunes, incluyendo Andorra, Bélgica, Luxemburgo, Malta y San Marino. Actualmente, al menos 145 de los 193 países miembros de la ONU ya reconocen a Palestina, aunque Estados Unidos ha bloqueado su aspiración a ser un miembro pleno en Naciones Unidas.
La amenaza israelí
La decisión diplomática ha generado una fuerte condena por parte del gobierno israelí y su principal aliado, Estados Unidos.
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, respondió a la ola de reconocimientos reiterando que no habrá un Estado palestino y tildando la acción como una “recompensa para Hamas” y el terrorismo. Netanyahu amenazó con extender la colonización en Cisjordania (conocida por Israel como Judea y Samaria) como posible represalia.
En un comunicado, Netanyahu afirmó: “Duplicamos los asentamientos judíos en Judea y Samaria [Cisjordania] y continuaremos por este camino”. Funcionarios israelíes están considerando anexar parte de la Cisjordania ocupada como respuesta a las medidas occidentales.
La postura colonial fue reforzada por ministros israelíes de ultraderecha. Itamar Ben Gvir y Bezalel Smotrich pidieron directamente la anexión de este territorio palestino ocupado. Smotrich declaró que la única respuesta a este movimiento "antiisraelí" es la "soberanía sobre la patria histórica del pueblo judío en Judea y Samaria, y eliminar de forma permanente la locura de un Estado palestino de la agenda”. La anexión, sin embargo, podría volverse en contra de Israel y alejar a países clave como los Emiratos Árabes Unidos, que normalizaron relaciones bajo los Acuerdos de Abraham.
Desde Washington, la Casa Blanca, a través de Karoline Leavitt, afirmó que reconocer a Palestina sería “una recompensa para Hamas”. El Departamento de Estado criticó los “gestos teatrales” de sus aliados clave, asegurando que su foco está en la “diplomacia seria”. El gobierno estadounidense incluso advirtió sobre posibles consecuencias para aquellos que tomen medidas contra Israel, incluyendo a Francia.
La División Europea
Mientras la mayoría de los países europeos ya reconocen a Palestina, aliados fundamentales de Israel como Alemania e Italia han resistido el impulso de Francia.
Alemania, un firme aliado de Israel históricamente, insiste en que el reconocimiento de un Estado palestino solo puede ser uno de los pasos finales de un proceso político que conduzca a la construcción de dos Estados, y no un paso inicial. El portavoz del gobierno alemán, Sebastian Hille, declaró que si bien no debe haber más anexiones, el reconocimiento "debería llegar al final del proceso. Pero ese proceso debe comenzar ahora”.
Italia se limitó a señalar que reconocer un Estado palestino podría ser “contraproducente”. En contraste, Rusia sigue considerando que la solución de dos Estados es la única manera de resolver el conflicto de larga data.
En medio de esta controversia diplomática, el ejército israelí intensificó su ofensiva en Gaza, dejando un saldo de 61 palestinos muertos y 220 heridos en las 24 horas previas al anuncio de Francia.