El Gobierno anunció que dejará de subsidiar las tarifas de las empresas. Sólo financiarán a familias vulnerables en un nuevo esquema de subsidios a la demanda. Así lo anunciaron funcionarios del Ministerio de Economía y de la Secretaría de Energía durante la última audiencia pública.
Salvador Gil, funcionario de Energía, explicó: "El nuevo esquema no contiene ningún tipo de subsidio a las actividades productivas. No sería compatible subsidiar a la energía y tener precios liberados".
En cambio, mientras explicó al detalle cómo funcionará la nueva canasta básica energética (CBE), informó: "Sólo se van a subsidiar necesidades humanas básicas y cuando sea necesario". De hecho, el nuevo esquema subsidiará directamente a la demanda, a través de una transferencia directa al banco, o un descuento en la factura.
En la misma línea, Martín Vauthier, asesor en Economía, afirmó: "En un contexto de recursos escasos, se eliminan subsidios a la demanda no residencial, por ejemplo, en procesos productivos, dado que en dicho caso no es posible asegurar que los beneficiarios reales sean los sectores de menores ingresos".
Además, defendió los subsidios a la demanda: "Permiten racionalizar el consumo, generando un ahorro para el país, y focalizar las transferencias en quienes más lo necesitan". Vauthier mostró el impacto de los subsidios en la macroeconomía: en 2023 el Estado destinó 1,5% del PBI, la mitad que el déficit fiscal.
Sobre el futuro de las tarifas para las empresas, Julián Rojo, investigador del IIEP-UBA, explicó: "Hasta febrero, toda la demanda de las distribuidoras que son no residenciales tenían subsidios en el precio mayorista. Eso se terminó. Las compañías más chicas tenían subsidios de entre el 70% y el 82%.".
Los aumentos para comercios e industrias pyme
En el informe sobre tarifas que realiza el IIEP, la UBA y el Conicet se observa que con la reprogramación trimestral que hizo Economía en febrero, que fija los precios mayoristas de la energía, los segmentos con mayor incremento en el precio de la energía serán los comercios e industrias pequeñas.
En el caso de los comercios pequeños con una potencia de 10 KW y un consumo de 1.200 kwh/mes, tuvieron un incremento del 276% en el precio mayorista de la energía. Hasta enero estos usuarios pagaban el 18% del costo. En el AMBA, pasarán de abonar una factura de $64.775 a $266.213 en febrero, con impuestos.
Para los pequeños usuarios industriales, con una potencia contratada de 35 KW y un consumo mensual de 6.500 Kwh/mes, tuvieron un incremento en el precio de la energía del 178%. Hasta enero estos usuarios pagaban el 31% del costo de la energía. Pasarán de abonar una factura de $274.875 a $1.060.187 en febrero.
Con los nuevos precios mayoristas, la cobertura de estos segmentos queda muy cercano al costo de generación. Por otro lado, se prevé que se elimine un subsidio especial que existía para las pymes inscriptas en el régimen mipymes. Se trataba de una bonificación que podía llegar hasta el 62% en el precio del gas natural. Había 122 mil empresas que contaban con este esquema.
Por este motivo, el Gobierno anunció que lanzará un programa de eficiencia energética, en conjunto con financiamiento del Banco Mundial, para dar créditos a comercios y pymes para que puedan reconvertir sus equipamientos eléctricos, y así lograr mayor eficiencia y ahorro.