Comprar un departamento de una habitación en San Juan tiene un costo promedio de $9.500.000, lo que convierte a la provincia en la más cara de Nuevo Cuyo para adquirir una propiedad. El dato se deprende de un informe elaborado por el Colegio de Corredores, en el que se miden los valores en todo el país. Los precios de venta de unidades habitacionales de una pieza tuvieron un incremento del 42% respecto del primer bimestre del año. En el rubro alquileres, las subas fueron más pronunciadas aún.
Un departamento de un dormitorio tiene un valor medio nacional de $12.900.000. El máximo valor se ubica en la zona centro de Santa Fe, en donde una propiedad de estas características tiene un costo promedio de $19.140.000. En la región Cuyo, San Juan lidera el ranking de precios, con $9.500.000, seguido de Mendoza con un valor de $9.000.000 y cerrando La Rioja, con un costo de $6.500.000, lo que posiciona a esta provincia como la más económica de Argentina.
En el caso de departamentos de dos habitaciones, San Juan es la provincia cuyana más cara de la región y casi alcanza el promedio nacional, con un valor medio de $18.250.000; le sigue Mendoza mucho más atrás con $11.600.000 y cierra La Rioja, con precios medios de $9.000.000. El aumento del valor medio nacional de compra-venta fue del 47% comparando diciembre con el primer bimestre del 2022.
En el caso de compra-venta de casas de tres dormitorios, se replica el panorama. En San Juan se consiguen a un valor medio de $24.500.000, en Mendoza el precio promedio es de $14.000.000 y en La Rioja de $10.000.000.
En cuanto al alquiler, el incremento al comparar diciembre con el primer bimestre del 2022 fue del 83%. Un departamento de una habitación se alquila en promedio a $37.000 en San Juan, en Mendoza a $35.000 y en La Rioja a $25.000.
El Colegio de Corredores de San Juan llegó a la conclusión de que los valores de “alquiler” con destino residencial han acompañado la variación anual presentada por el ICL del Banco Central cercano al 80%, en contraste con la variación de valores de compra-venta impulsado por la baja actividad de este rubro y que estuvo cercano al 50% anual.