La reforma laboral que el Gobierno nacional envió al Congreso viene con un capítulo impositivo con cambios que apuntan a bajar costos, incentivar la inversión y empujar la actividad económica que tendré efectos en todas las provincias, incluso en San Juan. Plazos fijos en dólares, alquileres, operaciones inmobiliarias, autos y empresas aparecen entre los principales alcanzados por las modificaciones.
Para la economista sanjuanina Lucila Avelin, el impacto general de las bajas impositivas puede ser positivo, aunque advierte que todo dependerá de su aplicación. “Todas las bajas impositivas siempre van a favorecer una posible reactivación. Hoy estamos yendo a un esquema de mucha competitividad entre las pymes, con apertura de importaciones y presión sobre los costos internos y externos. En principio, las rebajas que se trasladen a precios van a ayudar a reactivar el consumo y mejorar la competitividad, pero el desafío va a estar en cómo se implementen y en qué bienes terminen impactando”, explicó.
Plazos fijos en dólar y otras monedas
Uno de los cambios más relevantes está vinculado al impuesto a las Ganancias. El proyecto prevé eximir del tributo a los rendimientos de los plazos fijos en monedas distintas al peso -que ya estaban exentos- tanto para personas humanas como para sucesiones indivisas. La intención es mejorar las tasas de los plazos fijos en dólares y, al mismo tiempo, alentar a que los ahorros que hoy están fuera del sistema financiero vuelvan a los bancos.
La reforma también contempla eximir de Ganancias los resultados de operaciones de compra, venta, cambio o disposición de acciones y otros títulos de fuente argentina, con excepción de las monedas digitales.
Alquileres e inmuebles
En el mercado inmobiliario, el proyecto establece que no se pagará el impuesto a las Ganancias por los ingresos provenientes del alquiler de inmuebles destinados a vivienda. Sin embargo, el texto final aclara que no se admitirá la deducción del 10% del total de los alquileres devengados para el locador.
Además, a partir del 1 de enero de 2026 quedarán exentos los resultados derivados de la venta de inmuebles y de la transferencia de derechos sobre propiedades que hayan sido adquiridas desde el 1 de enero de 2028, lo que en la práctica implica la eliminación del impuesto cedular.
Desde el sector inmobiliario sanjuanino, la medida es leída como un incentivo clave para ampliar la oferta. El presidente de la Cámara de la Construcción e Inmobiliaria de San Juan, Mauricio Turell, sostuvo que se trata de una decisión que llega en un momento oportuno para la provincia. “Nuestro mercado de alquileres no está en condiciones de satisfacer la demanda actual, ni siquiera la local. Y con la actividad minera que se viene, esa presión va a ser mayor. Esta medida incentiva al inversor a volver al ladrillo y puede ayudar a revertir esa situación”, señaló. Agregó que el impacto también podría sentirse en los valores de los contratos. “Al momento de renovar un alquiler, el nuevo monto no tendría que ser tan alto. Esto permite que el canon sea redituable para el inversor, pero sin trasladar toda la presión al inquilino, y además deja margen para reinvertir”, explicó.
Esteban Costela, del Colegio Público de Corredores Inmobiliarios de San Juan, destacó especialmente la eliminación del impuesto cedular. “Antes se pagaba el ITI y, cuando se quitó, quedó solo Ganancias. Eso hacía que quienes habían comprado un inmueble desde 2018 y lo vendían después tuvieran que pagar hasta un 15% sobre una diferencia que, muchas veces, no era una ganancia real sino efecto de la inflación. Era ilógico. Que ahora se elimine ese impuesto es muy positivo para el mercado inmobiliario”, indicó.
Autos: menos impuestos internos y posibles bajas de precios
Otro de los puntos centrales de la reforma es la eliminación de impuestos internos para los autos que hoy están alcanzados por ese gravamen. La medida podría generar una baja significativa en los precios de venta, aunque se mantendrán otros impuestos como el IVA, Ingresos Brutos, tasas municipales y cargas laborales. Aseguran que, al reducirse la brecha de precios, también podría haber ajustes en los segmentos medios. Algunas estimaciones privadas indican que, en determinados casos, la baja al público podría rondar el 20%.
En San Juan miran el anuncio de reojo. Un empresario sanjuanino representante de una marca oficial valoró la iniciativa, aunque marcó sus límites. “Son medidas superpositivas para la economía, pero hay que aclarar que la eliminación del impuesto a los autos de lujo alcanza a un porcentaje muy chico del mercado. Es cierto que esos modelos van a bajar de precio, pero no está del todo claro que esa baja se traslade automáticamente al resto”, advirtió.
La reforma también elimina impuestos internos para seguros, servicios de telefonía celular y satelital, bienes suntuarios, embarcaciones de recreo y aeronaves. En cambio, se mantienen para tabaco, bebidas alcohólicas, cervezas y bebidas analcóholicas.
Empresas: menos Ganancias y un nuevo régimen de inversiones
El capítulo empresarial incluye una baja en la alícuota del impuesto a las Ganancias para sociedades, que pasará del 30% al 27% y del 35% al 31,5%, según el caso. Además, si las utilidades se reinvierten, no se aplicará el 7% correspondiente a la distribución de dividendos, lo que busca incentivar la reinversión en el país.
A esto se suma la creación del Régimen de Incentivo para Medianas Inversiones (RIMI), destinado a proyectos productivos en bienes muebles amortizables y obras de infraestructura, con distintos montos mínimos según el tamaño de la empresa, que van desde los 150.000 dólares para microempresas hasta los 9 millones de dólares para medianas tramo 2.
Desde el comercio sanjuanino, la lectura es más crítica. El presidente de la Cámara de Comercio de San Juan, Hermes Rodríguez, consideró que las medidas no alcanzan al corazón del sector pyme. “Al comercio minorista y a la pyme esto no le va a impactar. Lo que se necesita es una reducción real de la presión fiscal y de la carga laboral. Somos los que más empleo generamos y hoy no se está mirando al sector desde ese lugar”, afirmó.
Rodríguez también puso el foco en el consumo. “Mientras el ciudadano no recupere el poder de compra, difícilmente haya más ventas. Estas medidas pueden beneficiar a otros sectores, pero al comercio de cercanía no le están llegando”, concluyó.