San Martín llega a Mar del Plata para jugar mucho más que un partido: enfrenta una verdadera final por su permanencia en Primera División. Con el descenso al acecho y sin margen de error, el Verdinegro visita este sábado a Aldosivi en el Minella, desde las 17, en simultáneo con Godoy Cruz–Riestra. Solo ganar lo mantiene con vida. Todo lo demás lo condena. Pero si hay algo que este club sabe, es de batallas.
Porque al Verdinegro le costó cada ascenso, cada regreso al lugar donde siente que pertenece. Es el único representante sanjuanino en la máxima categoría, algo que lo define y que, en la previa, movilizó incluso a hinchas y clubes de toda la provincia. Minero lo expresó con un mensaje que se volvió viral: “San Juan debe ser de Primera”, un apoyo que expone la importancia del partido que enfrentará hoy San Martín. Es que no es solo un partido, sin la defensa de la identidad futbolera de toda una provincia.
Es cierto que el regreso a Primera no fue el sueño que imaginó todo el Pueblo Viejo. La temporada arrancó con resultados adversos que golpearon fuerte y empujaron al adiós del “cerebro del ascenso”, Raúl Antuña. Pero el equipo logró levantarse. Con la llegada de Leandro “Pipi” Romagnoli, recuperó ánimo, orden y orgullo competitivo. Cerró el año con seis partidos sin derrotas y un espíritu que volvió a encender la ilusión cuando el panorama parecía oscuro.
El panorama deportivo es complejo, pero no imposible: si San Martín gana y Godoy Cruz empata o pierde, habrá salvación directa. Si ambos ganan, tocará desempatar en cancha neutral. Si empata o pierde, descenderá. Una ecuación simple pero vertiginosa.
El Verdinegro llegó este viernes a La Perla del Atlántico tras su último entrenamiento en el Hilario Sánchez. Romagnoli apostaría por repetir el once que igualó sobre la hora ante Lanús: Borgogno; Portillo, Lecanda, Recalde, Orihuela; Jaurena, González; Fernández, Sebastián González, Tijanovich y Maestro Puch. Esteban Burgos regresa a la lista de convocados en lugar de Jonathan Menéndez.
Aldosivi también llega urgido y viene de un triunfo agónico ante Banfield. Farré formaría con Carranza; Ceratto, Cabral, Moya, Román; Gino, Bochi; Guzmán, Serrago, Giani y De la Vega.
Hay además un premio extra en juego: si San Martín logra mantenerse en la categoría, automáticamente jugará los octavos de final del Torneo Clausura, donde hoy se ubica octavo con 19 puntos. Pero todo eso pasará a segundo plano cuando la pelota empiece a rodar.
En un Minella colmado y con miles de sanjuaninos alentando desde la distancia, San Martín va por otra batalla de esas que forjan identidad. Son 90 minutos para defender una historia, un escudo, una provincia entera. Son 90 minutos para resistir y demostrar, una vez más, que el Verdinegro nunca baja los brazos. Hoy, más que nunca, está en sus manos.