Independiente y River quedaron a mano en el Libertadores de América. Fue 0-0 en un partido cerrado donde lo más destacado pasó por la temprana expulsión de Santiago López en el local. Con este empate, ambos estiran sus cuentas sin derrotas pero se alejan de la pelea de los de arriba.
La primera gran incidencia ocurriría pasados los 10 minutos, momento en el que Santiago López dejó su botín al intentar recuperar y terminó impactando en la zona genital a Paulo Díaz, valiéndole la tarjeta roja y condicionando al dueño de casa para lo que restaba.
Julio Vaccari reacomodó rápidamente sus piezas para cederle la posesión de la pelota pero sosteniendo un orden en líneas generales que le impediría a River poder desarrollar su juego. Bajo este concepto, la primera mitad tendría un juego aburrido y cerrado, con prácticamente nulas ocasiones de peligro tanto en un arco como en el otro.
En el complemente, principalmente con los ingresos de Manuel Lanzini y Franco Mastantuono, River comenzóa tener más peso específico en la zona ofensiva de la cancha con conexión entre sus volantes. De esa manera llegarían dos oportunidades claras para Miguel Ángel Borja, primero con un disparo que salvaría Rodrigo Rey y luego con un cabezazo que saldría por encima del travesaño.
Sin embargo, y más allá de la iniciativa de los de Marcelo Gallardo, el Rojo recuperaría nuevamente el orden y generaría un encuentro parejo y de pocos espacios. Así, el reloj seguiría con su curso, teniendo la última en un disparo de Nicolás Fonseca que se marchó pegada al palo
Finalmente, la historia en Avellaneda terminó sin goles y ambos se llevaron un punto. De esta manera, ambos se alejan de la pelea de arriba ya que Independiente queda en la 18º colocación con 16 unidades mientras que River se ubica en la 10º con 18.