Racing amaneció con un impacto inesperado: Gabriel Arias resolvió no renovar su contrato y dejará el club después de siete años como una de las figuras más influyentes del ciclo moderno. Su vínculo expira el 31 de diciembre y, pese a la propuesta que le acercó la dirigencia, el arquero optó por cerrar su etapa y buscar un nuevo destino. Por eso, el duelo de este lunes ante Tigre, por los cuartos del Torneo Clausura, marcará su despedida de la cancha de Avellaneda.
Arias llegó en 2018 y no tardó en transformarse en referente. En su primera temporada levantó la Superliga 2019 y a partir de allí inició una trayectoria marcada por logros: Trofeos de Campeones 2019 y 2022, Supercopa Internacional 2023, Copa Sudamericana 2024 y Recopa 2025. Acumuló 254 partidos, 101 vallas invictas y una autoridad que lo convirtió en líder del vestuario.
Sin embargo, en los últimos meses su realidad cambió. La irrupción de Facundo Cambeses —quien incluso debutó en la Selección Argentina— lo desplazó del arco titular. El quiebre se produjo tras la serie de Libertadores ante Peñarol, cuando Gustavo Costas decidió sustituirlo sobre el final para una definición por penales que nunca llegó. Desde entonces, las actuaciones del nuevo guardameta consolidaron su lugar y Arias quedó relegado.
Aunque el equipo aún sigue en carrera y podría avanzar a semifinales, el arquero ya no volverá a jugar en el Presidente Perón. Su ciclo, uno de los más exitosos de los últimos tiempos en el club, llega a su cierre con una salida que sacudió por completo al mundo Racing.