El reciente anuncio de Donald Trump, sobre su intención de comprar más carne argentina con el objetivo de reducir los precios internos en el país norteamericano, generó una ola de expectativas sobre una posible disminución de valores en el mercado local. Sebastián Parra, dueño de Frigoríficos Parra, una empresa reconocida en San Juan, habló de cómo este movimiento impacta en el sector productivo y desestimó cualquier baja inmediata en el precio en carnicerías sanjuaninas.
La decisión de Trump, que elogió al presidente Javier Milei y aseguró que Argentina está "luchando por su vida", se presenta como una primera mejora comercial concreta que Estados Unidos podría ofrecer. El mandatario estadounidense aclaró que su intención es que la compra de carne de res argentina sirva para reducir los precios en su propio país. Esta estrategia responde a una preocupación económica en Washington que es el precio de la carne, que ha sido uno de los ítems que más aumentó en el último año en Estados Unidos. La posibilidad de aumentar la cuota argentina -actualmente muy baja, de 20.000 toneladas anuales- serviría para atenuar la disminución de la provisión brasileña, con la que EEUU mantiene un conflicto político y comercial.
Desde la óptica de San Juan, el empresario Parra sostuvo que la compra por parte de Estados Unidos "no va a bajar el precio de la carne en Argentina", según dijo en diálogo con Radio Sarmiento este martes. Explicó que la noticia es "mal tomada" si se interpreta como una estrategia para el mercado interno. La baja de precios buscada por Trump es una estrategia de compra para mitigar los valores en su país.
El empresario enfatizó que el precio de la carne en Argentina siempre sigue el ritmo de la inflación, como ocurre también con otros productos esenciales. De hecho, Parra aseguró que en su experiencia, no conoce un año en el que la carne haya bajado de precio. A modo de ejemplo, señaló que, mientras que entre noviembre de 2023 y noviembre de 2024 la media res casi no sufrió modificaciones, en lo que va de 2025, la carne subió bastante, rondando entre el 33% y el 35% y este incremento se da pese a que se ha exportado menos que el año anterior.
Incentivo a la producción
Si bien no se espera una baja en los precios para el consumidor sanjuanino, Parra destacó que la apertura del mercado estadounidense es una excelente noticia para el sector productivo. El empresario subrayó que las exportaciones siempre "marcan la salud del sistema cárnico argentino". A mayor venta externa, existe mayor producción, lo cual contribuye a que el mercado esté más estabilizado.
Parra detalló que la apertura de un nuevo canal de exportación motiva a los productores a "hacer hacienda," lo que aumenta la cantidad de cabezas de ganado en el país. Esta dinámica es fundamental, ya que el sector viene de un escenario de bajo incentivo productivo debido a que 2024 fue el año de peor consumo de los últimos 110. Hoy, si bien el consumo aún no está en niveles normales, ante una eventual recomposición salarial y un aumento del consumo, la existencia de mayor stock de ganado hará que los aumentos de precios sean menos pronunciados.
Según el empresario sanjuanino, no hay que tenerle miedo a las exportaciones, por el efecto positivo que implica en la generación de puestos de trabajo y la entrada de divisas a la Argentina, lo que garantiza un mercado más estable a largo plazo, incluso si el impacto inmediato no se traduce en una reducción de precios al público.