El proceso de embarazo es un periodo que requiere una especial atención en la salud de la gestante, debido a que cada problema que se presente puede ser transmitido tanto de manera directa como indirecta al bebé. En ese marco, la salud bucal no está tan presente entre las embarazadas sanjuaninas, y ante esto, una odontóloga sanjuanina explica lo fundamental a tener en cuenta y cómo actuar ante alguna dificultad.
La médica Marisa Martínez (M.P: 477), en dialogo con Tiempo de San Juan explicó que para los odontólogos es importante el periodo de embarazado, ya que en las primeras semanas el bebé está en gestación, por lo que, si la madre tiene alguna enfermedad bucal o similar, se lo puede transmitir al bebé y perjudicar, entre otras cosas, el desarrollo de los dientes.
Por otra parte, debido a las condiciones de la gestación y los procedimientos que se utilizan a la hora de realizar cualquier tipo de tratamiento dental, muchos de ellos no pueden realizarse durante el embarazo, siendo el segundo trimestre el único en el que se puede trabajar.
“Si la madre tiene una lesión activa, generalmente la pasan mal. No se las puede medicar demasiado, por eso es importante que lleguen en buen estado de salud bucal. Generalmente, hay tratamientos que no se realizan durante el embarazo, si se aplica alivio de dolor, pero el tratamiento en sí, como el de conducto, se pospone para después del parto o para actuar en el segundo trimestre”, señala la profesional.
Ante este panorama, ¿cuáles serían las recomendaciones que debe tener en cuenta una mujer que atraviesa el proceso de embarazo?
La profesional señala que, si se trata de un embarazo planeado con tiempo, ambos padres deberían realizarse un control bucal. En el caso que la mujer ya se encuentre embarazada, la principal sugerencia es ir al menos una vez por cada trimestre al dentista.
“Es fundamental hacer una consulta odontológica preventiva, donde le explicaran detalles que pueden llegar a suceder durante el embarazo, como el sagrado de encías, donde hasta cierto punto es normal, por eso es importante reconocerlo. La aplicación de flúor también se hace en los tres trimestres, más allá del control de la boca. Hoy por hoy, la embarazada tiene acceso a mucha información y el obstetra le da los complementos vitamínicos necesarios. Si la madre está en buenas condiciones, el bebé va a recibir lo necesario para la formación correcta de sus dientes”, asegura la doctora Martínez.
Además, debido a la generación hormonal propia de la gestación, la embarazada puede presentar caries (relacionadas al ácido de las náuseas matutinas), encías adoloridas y mal aliento, entre otros problemas.
Otra de las indicaciones básicas que se brinda a las mujeres embarazadas para cuidar su salud bucal es la utilización de un cepillo extra soft y si la condición lo amerita, se indica una pasta dental con fluor que solo se consigue bajo receta.
También se hace un fuerte hincapié en el correcto cepillado. Al respecto, la odontóloga reconoce que en muchos casos a la embarazada le provoca asco algún dentífrico en especial o el uso del cepillo de dientes, pero la salud bucal no debería descuidarse, sobre todo si hay presencia de vómitos durante el embarazo. Esto es debido al ácido del vómito que, sumado a una incorrecta higiene, puede provocar daño en la estructura de los dientes, en el esmaltado, por ejemplo.
“Eso, y la consulta trimestral son importantísimas para un correcto cuidado de la salud bucal en las embarazadas. Si bien no es común que las mujeres tengan esto en cuenta, es fundamental que no se dejen estar para evitar problemas a futuro”, remarca la especialista.