Tras diversos informes presentados por especialistas sanjuaninos y la opinión del Ministerio de Infraestructura, que indicaron la necesidad de demoler la parroquia de Villa Mercedes, en Jáchal, debido al riesgo de derrumbe de su estructura, desde el Arzobispado señalaron que avanzan para que dicha medida se ponga en práctica. Durante un viaje al departamento del norte, monseñor Jorge Lozano aseguró que el proyecto sigue en marcha y ofreció detalles sobre la tarea.
Al respecto, Lozano sostuvo que ya se recibieron dos de los tres presupuestos requeridos para la demolición del histórico edificio que data de 1886, una decisión inevitable debido al riesgo que representan sus instalaciones para la población.
El Arzobispo remarcó que la medida busca “evitar víctimas o daños” en la localidad, ya que las estructuras actuales presentan un peligro inminente de derrumbe, según informó el medio Actualidad Jachallera. Asimismo, señaló que aún falta la recepción de un tercer presupuesto para completar el proceso administrativo y financiero, mientras se avanza en el análisis de la estructura que tendrá el nuevo templo, que será destinado a la devoción de Nuestra Señora de las Mercedes.
Cabe recordar que desde el pasado 18 de enero de 2021, tras el último terremoto ocurrido en la provincia, el templo histórico de la Parroquia de Nuestra Señora de las Mercedes, en Jáchal, está cerrado.
El movimiento provocó que su estructura de 139 años de antigüedad quedara al borde del colapso, lo que la transformó en un peligro. Después de diversos estudios sobre el estado del edificio, el pasado 23 de abril se realizó en localidad una reunión de la que participaron representantes eclesiásticos, autoridades municipales, equipos técnicos y vecinos de la comunidad parroquial. En esa oportunidad se dieron a conocer los informes técnicos elaborados por la Facultad de Arquitectura de la Universidad Nacional de San Juan, el Ministerio de Infraestructura de la provincia y el Instituto Nacional de Prevención Sísmica (INPRES); y se decidió demoler el templo.
Si bien la decisión generó conmoción y dolor en la comunidad, las autoridades acordaron proteger a la población con la demolición del edificio y la posterior construcción de uno nuevo.
*Con información de Actualidad Jachallera