Este 18 de agosto Cristian Santos debería estar soplando las velitas de un nuevo cumpleaños. Sin embargo, desde 2018 su familia no sabe nada de él. En medio de la ausencia, su madre, Virginia Roquier, publicó en las redes sociales un mensaje desgarrador. De hecho, ella siempre manifestó que creía que Cristian podía estar en una red de trata de la que no puede salir.
"Feliz cumple 30 años hijo.estes dnd estés deseo q dios te cuide y te traiga de nuevo a mi lado..Te extraño hijo siempre estás en mis pensamientos. Me gustaría volverte abrazar y llenarte de besos .y decirte lo mucho q te amo.. me gustaría volver el tiempo atrás para nunca más soltarte", escribió Virginia con una foto en la que se la ve acompañada de Cristian.
Cristian tenía 25 años cuando fue visto por última vez el 10 de abril de 2018. Aquel día había asistido a una consulta en el Hospital Rawson con su psicóloga, que lo atendía por una crisis emocional y un tratamiento contra las adicciones. Buscaba autorización para viajar a Neuquén, donde lo esperaban para un examen psicológico en la Policía. La profesional le aconsejó que no lo hiciera, y luego declaró que lo vio retirarse tranquilo. Sin embargo, horas más tarde, las cámaras de la Terminal de Ómnibus lo registraron subiendo a un micro rumbo a Mendoza. En las imágenes aparece cerca de otro joven, aunque nunca se pudo determinar si lo acompañaba. Virginia, al ver el video, aseguró que lo notó “perseguido”, como si intentara escapar.
Cuando su hijo no regresó a casa al mediodía, Virginia comenzó a llamarlo, pero el celular estaba apagado. Recorrió el centro y, ya de noche, se presentó en la comisaría para denunciar su desaparición. Recién el 14 de abril supo que Cristian había viajado a Mendoza. Entonces viajó con familiares y pasó días enteros buscando en la Terminal y en distintas dependencias policiales, pero sin éxito. Nunca pudo acceder a los registros de las cámaras mendocinas y denunció destrato.
Con los meses comenzaron a circular rumores cada vez más angustiantes. Le llegaron mensajes que decían que Cristian estaba en Mendoza travestido y prostituyéndose, con el nombre de Sofía León, e incluso que había pasado por cirugías. Virginia investigó por su cuenta, recorrió zonas rojas, habló con la comunidad trans y hasta ingresó a boliches, pero jamás logró confirmar esos datos.
Hoy la causa está en manos de la Policía Federal Argentina, ante la sospecha de que Cristian pueda haber caído en una red de trata. En ese camino incluso recurrieron a una vidente, quien dijo que él estaría siendo explotado por una organización criminal.
Virginia insiste en que su hijo no desapareció por voluntad propia. “Yo sé que si él estuviera bien buscaría la forma de comunicarse conmigo, nunca fue de irse sin decirme nada”, repite. Recuerda que a los 16 años Cristian contó que era gay y que siempre fue aceptado en la familia, por lo que descarta que esa sea una razón para haberse marchado sin avisar.
Mientras tanto, la madre se aferra a la esperanza y al pedido de ayuda: quien tenga información puede comunicarse al 2995409476.