Los brindis en el trabajo, las reuniones con amigos, las cenas de despedida, más las fiestas incluyen una cantidad de comida que muchas veces, si no hay un cuidado, puede terminar afectando la salud. Evitar los famosos “atracones” de fin de año es posible, y la nutricionista sanjuanina Jimena Oliver comparte cómo cuidarse sin tener que rechazar esas opciones propias de esta época que son inevitables.
El primer punto destacado por la profesional es no generar alteraciones en la rutina alimentaria. Al respecto, señala: “Sería importante mantener una buena alimentación los días previos a la fiesta. Una alimentación normal, equilibrada, no hacer restricciones, que es lo que la gente tiende a hacer para buscar una compensación”.
Sucede que por lo general se tiende a pensar que, si no se come en el almuerzo, o se almuerza liviano de más, se podrá comer en la cena sin culpa, pero el cuerpo no lo toma de esa manera, generando alteraciones en el metabolismo que luego se vuelcan en malestar o sensación de hinchazón. Para evitar esto, además de mantener la rutina de comidas, la licenciada Oliver señala como factor fundamental incorporar mucha agua, sobre todo los días donde se sabe que se comerá o beberá de más. Mantenerse hidratado es fundamental ante una ingesta de comida que suele ser bastante pesada y teniendo en cuenta que el alcohol provoca deshidratación en el cuerpo.
Otro tips importante es sumar más verduras y frutas, sea en las celebraciones de fin de año como en el resto de las comidas. Tanto frutas como verduras ayudan a contar con preparaciones más saludables y tienen un alto porcentaje de agua, ayudando a la hidratación.
Sin duda un clásico de esta época del año son los recalentados. Durante las cenas de Navidad y Año Nuevo se realizan varias preparaciones que se terminan comiendo a lo largo de la semana. Para evitar intoxicaciones, la profesional recuerda que aquellas preparaciones que incluyen huevo como así también salsas o similar, deben tener la menor exposición al calor posible. Al terminar las cenas, guardar lo que sobró en envases de vidrio o plástico en la heladera y si se piensa congelar, la sugerencia es hacerlo en porciones individuales. “Tener en cuenta que, si vamos a congelar algo, se puede descongelar una sola vez, no se puede volver a congelar”, remarcó.
El alcohol suele tener bastante presencia tanto en las cenas de las fiestas como en cualquier reunión que se da en esta época del año. Para evitar los efectos nocivos, una de las sugerencias de la licenciada es primero, cenar con soda, aguas saborizadas naturales o cualquier otro tipo de bebida sin alcohol. Al momento de ingerir algún trago o algo para el brindis, intercalar la bebida alcohólica con agua, para evitar la deshidratación y suavizar la resaca del día siguiente.
Hay quienes se exceden bajo la licencia del “détox post fiesta”. Ante esto, la licenciada aclara que no hay una desintoxicación más que la que realiza el cuerpo de manera natural. Pese a ello, para evitar la pesadez, el malestar, pasarse de copas o comer de más generando, con mantenerse hidratado, comer frutas y verduras y controlar las porciones se puede disfrutar de las despedidas de fin de año como de las cenas para las fiestas sin culpa ni remordimiento.