A un día del voraz incendio que azotó en la reserva natural Parque Sarmiento, donde 12 hectáreas se vieron afectadas por el paso de las llamas, personal que realiza trabajos en el lugar explicó que todavía no saben a ciencia cierta qué fue lo que originó el fuego, aunque se barajan dos hipótesis.
Del mismo modo en que ocurrió unos tres años atrás, los expertos sospechan que el incendio forestal en el área protegida se originó producto de una falla eléctrica en los cables del tendido eléctrico que por allí pasa.
Según dicen, aquella vez, las aves de gran tamaño se posan y pelean sobre el cableado, provocando el daño del mismo y causando chispazos que se convierten rápidamente en fuego, dada la sequía de la forestación que lo rodea.
Como hallaron aves carbonizadas cerca del árbol que ardió en llamas y que se encuentra próximo a los cables, suponen que en esta oportunidad sucedió algo parecido. Incluso, las mismas personas que suelen frecuentar el sitio así lo afirmaron, puesto que contaron que trataron de sofocar los primeros focos, pero les fue imposible porque el fuego avanzó a pasos agigantados.
No obstante, desde bomberos manifestaron que también pudo ser obra del hombre, ya que el personal que trabaja a diario en las inmediaciones suele iniciar pequeñas fogatas para mantenerse caliente, cuando el frío es un enemigo.
Es que en el interior de la reserva ecológica se está llevando adelante la limpieza de los caminos y de los canales ubicados a los costados, por lo que hay presencia constante de personas en el sitio.
Casualmente, con esas máquinas que suelen trabajar en la reserva se pudo cooperar a bomberos en su acción de controlar el fuego, ya que con las retroexcavadoras movilizaron tierra para aplacar las llamas.
El jefe de Bomberos Voluntarios de Zonda, Jon Recabarren, le dijo a Tiempo de San Juan que la afectación que sufrió el Parque fue de un 10%, donde no habría tanta vida silvestre dada la sequía que se aprecia en los últimos años en el lugar.