Después de semanas de investigación y seguimiento, personal de la Brigada de Investigación Central logró detener a un conocido delincuente sanjuanino. Se trata de Bartoloccini, de 32 años, quien fue localizado en una vivienda del barrio AOMA, en Santa Lucía, tras una orden de allanamiento solicitada por la UFI Delitos contra la Propiedad.
El nombre del sospechoso ya era familiar para la Justicia. Había sido declarado reincidente por una serie de robos a locales comerciales del microcentro y estaba siendo buscado nuevamente por un nuevo hecho delictivo.
La reciente pesquisa comenzó luego de un robo ocurrido el 15 de octubre en el local Megatone, donde desapareció una notebook exhibida para la venta. Las cámaras del lugar revelaron la maniobra: el sujeto aprovechó un momento de distracción del personal, escondió el equipo entre su ropa y salió sin ser advertido.
El análisis de esas imágenes permitió identificarlo con claridad, lo que llevó a los investigadores a solicitar el operativo que terminó con su captura.
Bartoloccini ya había estado tras las rejas en otras oportunidades. En abril de este año fue detenido junto a su pareja, Verón, por una serie de robos en joyerías y relojerías céntricas, entre ellas Tic-Tac, Bofinger, Ana Allende y Grossi. En aquella ocasión, obtuvo una condena condicional. Sin embargo, a fines de 2024 volvió a ser arrestado por sustraer un televisor del local Naldo, en la peatonal.
Pese a su extenso prontuario, el delincuente volvió a delinquir y esta vez su suerte cambió: quedó nuevamente a disposición de la Justicia, acusado de una cadena de robos que lo convirtió en uno de los ladrones más conocidos del centro sanjuanino.