El mercado inmobiliario sanjuanino vive semanas de una actividad inusual. Tras las elecciones legislativas y la posterior calma cambiaria, aumentaron las consultas, volvieron a concretarse operaciones que estaban en pausa y los créditos hipotecarios retomaron un rol central en la compraventa de viviendas. Sin embargo, especialistas coinciden en que el repunte local contrasta con un escenario nacional donde las tasas siguen siendo de las más altas de América Latina.
Desde la Cámara Inmobiliaria de San Juan, su presidente, Mauricio Turell, afirmó que la reactivación “se notó apenas pasaron las elecciones”, especialmente por el regreso de los créditos hipotecarios. En el mismo sentido, Esteban Costela, titular del Colegio Público de Corredores Inmobiliarios, aseguró que “el lunes posterior a los comicios ya hubo un salto en las consultas”, impulsado por mayor estabilidad cambiaria y mejores condiciones bancarias.
El sanjuanino Iván Orozco, director internacional y coordinador de Estadísticas de la Federación Inmobiliaria Argentina, coincidió en el diagnóstico y explicó que el mercado venía de un período de freno marcado por la incertidumbre previa a las elecciones. Sostuvo que, en los meses anteriores, los bancos endurecieron las condiciones -sobre todo el Banco Nación-, lo que recortó el acceso al crédito y redujo las ventas. Tras los comicios, dijo, “la demanda volvió a activarse de inmediato”, especialmente en viviendas de entre 80.000 y 120.000 dólares.
Orozco también describió un movimiento similar en los alquileres, donde la demanda se incrementó de manera generalizada.
Tasas a la baja, pero todavía entre las más altas de la región
Mientras en San Juan el crédito tomó nuevo impulso, a nivel nacional varias entidades modificaron sus tasas:
- BBVA bajó del 10,9% al 7,5%,
- ICBC del 13% al 11%,
- Banco Nación subió de 4,5% a 6%, aunque sigue siendo la tasa más baja del sistema.
Aun con estos ajustes, el promedio argentino se mantiene en torno al 11,5%, con bancos que trepan hasta el 15%. En comparación regional, las diferencias son marcadas:
- Chile: 5,2%,
- Uruguay: 3,8% a 4,5%,
- Perú: 6% a 9%,
- Paraguay: 8% a 10%,
- Brasil: 11% a 13%, sin indexación UVA.
La inflación es la variable que explica buena parte de esta brecha. En Argentina, el capital de los préstamos UVA se actualiza por un índice que, si bien se redujo del 211% anual a menos del 30% en dos años, no registra un dígito desde hace casi dos décadas.
Más propietarios y niveles récord desde 2018
Según datos del Banco Central, octubre marcó el mes de mayor crecimiento del crédito hipotecario en siete años. El economista Federico Rouco estimó que el financiamiento para vivienda pasará de representar el 0,04% del PBI a 0,5% a fin de año, con 40.000 nuevos propietarios incorporados al mercado.
Los salarios recuperaron poder adquisitivo en dólares y la cuota UVA volvió a quedar por debajo de los créditos tradicionales, permitiendo que miles de familias vuelvan a calificar para un préstamo después de años.
El valor del metro cuadrado, la otra variable decisiva
Entre 2018 y 2023, el precio a nivel nacional del m² cayó entre 25% y 35% en dólares. En 2024 y 2025 comenzó una recuperación gradual, con aumentos del 3% al 12% según la zona. Pese a este repunte, los especialistas coinciden en que los valores siguen más cerca del piso que del techo.
Ante este panorama, surge el dilema: ¿esperar tasas más bajas o comprar antes de que suba el precio de las propiedades? Analistas advierten que, si el valor del m² sube más que la baja de tasas, la espera puede convertirse en un mal negocio.
Lo que viene
Las consultoras proyectan una inflación del 30% para 2025, del 19% para 2026 y del 11% para 2027, con chances de llegar al dígito recién dentro de tres años. En ese escenario, los créditos UVA podrían ganar previsibilidad, aunque requerirán que los ingresos familiares acompañen la evolución inflacionaria durante décadas.