Mientras la industria vitivinícola espera precisiones sobre la forma en que se implementará el "dólar vino", que la Nación asegura arrancará a partir del mes de abril, en San Juan los bodegueros estiman que este debería alcanzar el valor equivalente al dólar MEP, que ronda los $366 en los mercados bursátiles. Por su parte, desde la Confederación Federal Pyme piensan que debería establecerse en al menos $300.
La Nación prometió instrumentar un dólar diferencial como el que aplicó con la soja, para que redunde en mejores ingresos para la cadena exportadora. Al respecto, el presidente de la Cámara de Bodegueros, Mario Pulenta; dijo que ese dólar vino diferencial para la exportación ‘’debería estar en el orden del dólar MEP porque ‘es en el que se basan los costos de los insumos del sector’’. El MEP es un dólar que se usa en las transacciones de la bolsa y aunque fluctúa, hoy arrancó en 366 pesos, bastante lejos del precio del dólar oficial de $205,50 con que se concretan las exportaciones argentinas.
Para Pulenta, la aplicación de esta medida para fomentar una mejora en las exportaciones vitivinícolas será beneficiosa siempre y cuando ‘’se defina un valor acorde para tratar de sostener las exportaciones’’.
Juan José Ramos, titular de la Asociación de Viñateros Independientes y directivo de la Confederación Federal Pyme; dijo que lo ideal sería que el valor diferencial que se aplique para exportar sea el del dólar blue, pero saben que eso no ocurrirá. En cambio, opinó que de acuerdo a las proyecciones del anterior ‘dólar soja’, ‘’ahora el dólar vino debería tener un valor de 300 pesos’, indicó Ramos.
El sector industrial vitivinícola viene insistiendo hace tiempo en que se encuentra en un mal momento por múltiples causas, y además del tipo de cambio atrasado, detalla el aumento de insumos por encima de la inflación, retenciones, aranceles por falta de tratados de libre comercio, imposibilidad de importar y pagar gastos afuera para la promoción. A todo eso se suma la escasez hídrica y las contingencias climáticas. Por eso reclaman entre otras cosas, un dólar diferencial para exportar.
Por su parte, Bodegas de Argentina –la cámara más grande de bodegas- solicitará hoy una reunión con el Secretario de Agricultura y Ganadería, Juan José Bahillo, para trabajar sobre el valor, duración y la metodología de aplicación del ‘dólar vino’ que la Nación piensa implementar a partir del mes próximo, según anticipó la titular de la entidad, Patricia Ortiz, a Tiempo de San Juan.
La directiva además bajó las expectativas del anuncio, porque si bien la medida es algo esperado por el sector, no producirá beneficios en forma instantánea como ocurrió con la soja. ‘Porque seas más competitivo no vas a salir al otro día y exportar más, es difícil conquistar nuevos mercados y aumentar ventas. Conseguir nuevos espacios no es algo automático, esto no es un comoditie, así que el trabajo se ve en el tiempo. Con un mejor precio se puede empezar a trabajar productos de diferentes segmentos y empezar a colocarlos, pero no es algo inmediato’’, aseguró Ortíz.
El pedido de Massa
A cambio de otorgar un dólar diferencial a la industria del vino, el ministro de Economía, Sergio Massa pidió a las bodegas ‘mantener buenos precios en el mercado’’. Ortiz dijo que eso ya está implementado a través del programa Precios Justos que establece un incremento del 3,2% mensual, algo por lo que se quejan los bodegueros porque está por debajo de la escalada inflacionaria. ‘’Eso nos obliga a hablar constantemente con el Secretario de Comercio Interior, (Matías) Tombolini y mostrarle que nuestros costos no dan para mantener esos precios. Pero bueno, eso es lo que está acordado y las cadenas no aceptan listas de precios superiores a esos precios, así que el pedido de Massa está más allá de lo que nosotros queramos o no’’, señaló.
En noviembre del año pasado, Massa anunció la implementación de un dólar para la vitivinicultura que causó malestar en el sector porque no se cumplió. El sábado pasado, en la Fiesta de la Vendimia, el titular de Economía volvió a plantear su instrumentación y esta vez le puso fecha, desde el 1 de abril próximo. Ahora la industria espera que se definan los detalles de su aplicación para determinar cuál será el impacto en la industria.