Tras una gran actuación en el clásico cuyano frente a Godoy Cruz, Nicolás Watson se convirtió en uno de los nombres más mencionados por los hinchas verdinegros. El volante central, figura en el triunfo clave de San Martín, pasó por el streaming de Tiempo de San Juan y habló de todo: su presente en el club, el partido más esperado del semestre, su vínculo con la familia, su historia como futbolista, y cómo se adapta a la vida sanjuanina.
“Necesitábamos esta victoria”
Watson no ocultó la emoción que le generó disputar y ganar su primer clásico cuyano. “Fue un partido muy importante, lo veníamos buscando. Sabíamos que la gente lo esperaba con mucha ilusión y creo que les devolvimos una alegría que necesitaban tanto como nosotros”, expresó. El ex Instituto valoró el envión anímico que significa este triunfo: “Ahora quedan dos partidos y queremos sumar todo lo posible para cerrar esta primera etapa de la mejor manera”.
El camino no fue fácil
El cordobés reconoció que no fue sencillo ganarse un lugar. “Al principio, después del cambio de técnico, ni siquiera estuve convocado. Pero me mentalicé en seguir trabajando, en mejorar lo que yo sentía que estaba haciendo mal y esperar mi oportunidad. Por suerte llegó y la pude aprovechar”, explicó con madurez.
Con humildad, agregó: “Siempre que voy a un club trato de dejar algo bueno de mí. Estoy muy contento de haber jugado este partido tan importante y que hayamos ganado”.
Herencia futbolera y apoyo familiar
Hijo de Sergio Watson, ex delantero con pasado en Godoy Cruz, y hermano del también futbolista Franco Watson, Nicolás creció rodeado de fútbol. “Con mi papá hablamos más del día a día que del rendimiento. Él siempre nos aconseja desde lo que vivió, lo que hizo bien y lo que no tanto. Trato de aprender”, contó.
También se refirió a la experiencia de haber jugado con su hermano en Instituto: “Compartimos plantel en la B Nacional y en Primera. Fue muy lindo para la familia. Ahora cada uno está en su club, pero nos seguimos extrañando”.
"Cuando era chico jugaba de delantero, como mi viejo. Pero con el tiempo me fui tirando más al medio. Los buenos nos tiramos para atrás”, bromeó entre risas.
“Las cosas que cuestan se disfrutan más”
Watson, que se define como un luchador, también se sinceró sobre los momentos difíciles: “A veces uno hace todo el esfuerzo, pero los resultados no llegan. Te vas a tu casa triste, con la cabeza a mil. En esos momentos hay que apoyarse en la familia y seguir entrenando. Por eso este triunfo fue un desahogo. Cuando las cosas cuestan, se disfrutan mucho más”.
Con la mira en Lanús y el sueño de Primera
San Martín enfrentará a Lanús en la próxima fecha, y Watson ya piensa en lo que viene. “Después de ese partido creo que tenemos un parate. Nos va a venir bien para corregir cosas y seguir conociéndonos más entre nosotros. El objetivo es claro: dejar a San Martín en Primera”.
El futbolista cordobés no sólo fue clave en el triunfo más esperado del semestre, también dejó en claro que tiene claro su rol, sus objetivos y que está dispuesto a dejar todo por la camiseta. Con humildad, trabajo y una familia que lo banca, el mediocampista cordobés se ganó un lugar en el corazón del Pueblo Verdinegro.