Sí, pasa hasta en las mejores familias. El máximo dirigente de Boca, Jorge Ameal, y su jefe de seguridad, Juan Tagliaferro, protagonizaron un particular momento minutos después del arribo del plantel y cuerpo técnico xeneize al hotel Del Bono Park. Ambos protagonizaron una pequeña discusión por el saludo de los jugadores a los hinchas que no se dio en ese momento y sí 40 minutos después.
Es un hecho curioso que no siempre ocurre, o mejor dicho que las cámaras no suelen captar. Ocurrió en el hotel de Capital, ubicado en por calle Ignacio de la Rosa, cuando Boca llegaba al edificio para instalarse y prepararse para enfrentar a Universitario de Perú este jueves en el Bicentenario, en el marco del Torneo de Verano.
El plantel llegó en su exclusivo colectivo de la marca Bariloche pasadas las 20.30. Russo, Carlitos Tévez y el sanjuanino Emmanuel Mas fueron algunos de los futbolistas que extendieron su mano para saludar a la multitud de hinchas que aguardó por horas en la puerta del hotel. Luego subieron a sus habitaciones, aunque por algunos minutos porque debían bajar a la planta baja a cenar.
Sorpresivamente, cuando aún quedaban algunos periodistas en el interior del hotel, bajó un grupo de jugadores. En principio iban a salir a saludar y firmar autógrafos, aunque el único que se acercó a los afortunados que estaban en el interior del edificio fue Sebastián Villa. El resto se esfumó. Esto desconcertó no sólo al delantero colombiano, quien quedó "pagando" entre algunos fans, sino también al presidente.
Ameal, sin tapujos, se acercó hasta la seguridad que trajo Boca desde Buenos Aires y comenzó a recriminarle lo ocurrido. "No quiero más esta payasada. Si van a bajar los jugadores tienen que saludar. No puede pasar esto otra vez ", le dijo a Tagliaferro, enojado. El problema de comunicación y coordinación, porque aparentemente el plantel primero iba al comedor y luego salía a saludar, puso de los pelos a Ameal.
Acto seguido, tras 40 minutos, bajó todo el plantel. Si bien en un principio se creía que iban a bajar sólo un par de futbolistas, al final lo hicieron todos: desde el sanjuanino Emmanuel Mas hasta Carlitos Tévez. Este último y Wanchope Ávila, los que se quedaron por más de 20 minutos cumpliéndole el sueño a los simpatizantes sanjuaninos.