Mientras River ya espera ansioso el Mundial de Clubes, Barcelona también se prepara de la mejor manera y no quiere perder a nadie para la gran cita. La prueba de ello se dio en la revancha por los 16avos de final de la Copa del Rey, cuando Luis Enrique optó por finalizar con 10 jugadores ante el Villanoense, al que los catalanes golearon por 6 a 1.
El entrenador sabía que la serie estaba definida ante el conjunto de ascenso y por eso decidió no poner un jugador cuando se lesionó Mathieu. El motivo era que ya había hecho un cambio y en caso de colocar a alguien más, los elegidos para entrar eran Andrés Iniesta, Neymar o Luis Suárez. Ante esto, el técnico no arriesgó a ninguna figura y se dio el lujo de finalizar así los últimos 10 minutos, con el agregado de que Lionel Messi estaba en la tribuna.
Ante esto, muchos criticaron su actitud, pero el entrenador respondió así: "Opté no arriesgar luego de que se lesionó Mathieu, a pesar de que tenía a futbolistas de jerarquía en el banco. Como estaban fríos no quería tener alguna baja por lesión. Pido disculpas si lo sintieron como una falta de respeto del lado del Villanoense, pero lo volvería a hacer".
Fuente: Infobae