El martes termina con un caso policial que tendrá repercusiones. Un anciano fue hallado muerto en Pocito. Estaba sentado en una silla, con la cara ensangrentada y la cabeza hacia atrás.
Para continuar, suscribite a Tiempo de San Juan. Si ya sos un usuario suscripto, iniciá sesión.
SUSCRIBITEEl martes termina con un caso policial que tendrá repercusiones. Un anciano fue hallado muerto en Pocito. Estaba sentado en una silla, con la cara ensangrentada y la cabeza hacia atrás.
Fuentes policiales indicaron que el fallecido era una sereno, identificado como Luis Ignacio Burgos, de 82 años. Cuidaba la construcción de una propiedad ubicada en Calle 8, entre Cervantes y Labrador, detrás del Estadio del Bicentenario, en la zona de Médano de Oro.
Según informaron, el cuerpo sin vida fue encontrado en un rancho, al costado de la casa que se está edificando. El hombre vivía solo y habría muerto cerca en la noche del lunes o este mediodía.
Las fuentes afirmaron que el hijo de Burgos fue quien se topó con la dantesca escena y alertó a la Policía. El anciano tenía sangre en la boca y la nariz. Fue a verlo como a las 15 y al ver que la puerta estaba cerrada se marchó. Después volvió a las 19 y entró al notar que no contestaba y resultaba extraño que no atendiera. Fue ahí que encontró el cadáver de su padre.
Los peritos no descartaron que se trate de un homicidio. No obstante, un primer examen del médico legista demostró que a simple vista no le detectaron lesiones los ojos y rostro, tampoco vieron signos de acciones de defensa.
A cargo de la investigación está la UFI Nº2 de Delitos Especiales. Trabaja en el lugar en el fiscal Renato Roca, junto a los ayudantes fiscales Cristian y Maximiliano Gerarduzzi. Coordina el fiscal Iván Grassi.
Contenido especial