Saber que el bebé que acabás de parir va a quedarse internado en Neonatología no es fácil de aceptar. El desprendimiento es muy duro aunque los padres saben que es lo mejor para el niño recién nacido. Para contener a los padres, hermanos y abuelos del bebé, se realiza una tarea enorme dentro del servicio del hospital Rawson. Además de la asistencia psicológica, hay un enorme trabajo para salvar vidas que es encarado diariamente por casi 200 profesionales, que se abocan a atender las 56 unidades para prematuros que hay disponibles en el Estado.
Para recordar la "Semana del Prematuro", por décimo año consecutivo vistieron de superhéroes a varios de los peques internados. La idea nació de un médico argentino y se replicó en varias Neo del país. San Juan no fue la excepción. Padres y familiares de los bebés viven una jornada especial, llena de optimismo. De cada 100 nacimientos, 8 son niños de menos de 37 semanas de gestación -y de ese número, el 1,1% de los prematuros pesa menos de 1.500 gramos-. Estos son los peques que son atendidos en el servicio de Neo del Rawson y muchos de los que hoy se vistieron de Superman.
Neo es un servicio dotado de tecnología única en la provincia, incluso tiene equipamiento que no posee ninguna clínica privada. En Neo hay 12 unidades de Terapia Intensiva, 20 de Terapia Intermedia y 20 transicionales (donde están los bebés que están por ser dados de alta). En total, son 52 camas que se pueden extender hasta 56 cuando hay necesidad. A estas unidades, se suman 60 de control, que es donde están los niños recién nacidos en general. La ocupación promedio suele ser del 80%. Para atender a los bebés, hay 50 médicos trabajando, 130 enfermeras, kinesiólogos, ayudantes de enfermería y una psicóloga.
Además del trabajo que se realiza a nivel médico, la contención psicológica juega un rol importante. Se realizan talleres para padres y abuelos. Pero hay una tarea especial que se desarrolla con los hermanos de los bebés internados. Para prepararlos, realizan simulacros con los hermanitos, les enseñan con muñecos cómo se les salvan la vida a los más chiquititos gracias a la labor que se realiza en el servicio. En este sentido, y con la intención de contener, se realizó en esta semana una teatralización con una pareja que tuvo su bebé en Neo durante 107 días.
Es clave considerar qué se puede hacer para prevenir un nacimiento de un prematuro. El control del embarazo es primordial -al menos cinco veces durante los 9 meses- (las infecciones urinarias, la hipertensión arterial y el sobrepeso son factores que pueden adelantar un parto); en segundo lugar es muy importante el lugar en donde se produce el nacimiento y finalmente, si el bebé nace prematuro, saber qué hay muchísimas chances de que el niño pueda desarrollar una vida normal tras la atención personalizada y la innovación tecnológica.