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SUSCRIBITE Con el frío que azota a la provincia, empleados de la Terminal de Ómnibus dicen que las personas que viven en situación de calle se "instalaron" en el lugar que se encuentra en refacción pero en su pleno funcionamiento y esto genera un conflicto para quienes allí trabajan que, además, denunciaron que hasta tienen sexo en el cajero automático.
A través de diversas vías, Tiempo de San Juan recibió la queja de los trabajadores de la estación que manifiestan estar cansados de la convivencia con los indigentes que paran por las noches en el lugar. "Esto directamente se convirtió en su casa, hacen lo que quieren. Ayer una compañera, cuando llegó a las 6 de la mañana a trabajar, encontró a dos personas teniendo relaciones sexuales dentro del cajero. Es una vergüenza", expresó una de las denunciantes que prefirió reservar su identidad.
Es que al igual que comentaron otros testimonios, por los horarios en los que se manejan (muy temprano en la mañana y tarde en la noche) en su entrada y salida, aseguraron tener miedo a algún tipo de represalia.
"El olor que hay acá es nauseabundo, usan los canastos de la basura para tapar los accesos, ocupan el espacio como quieren y la gente que espera los colectivos debe hacerlo afuera en la plataforma", contó otro empleado de boletería.
El punto del conflicto se encuentra en el ala sur de la Terminal, en el área donde se encuentra la oficina de Turismo y en el ingreso a lo que antes funcionaba el comedor y hoy se instalaron varias boleterías.
"A las 21, cuando oscurece y se pone más frío, ya se puede ver cómo se van instalando y a las 23 ya es directamente un campamento", detalló otra mujer al mismo tiempo que señaló: "La bronca que tenemos todos es que ellos tienen un lugar a dónde ir, un hogar con comida pero como tienen que cumplir horarios y ciertas normas, prefieren venir acá y hacer lo que se les cante".