Durante el último mes del año se realizan diversas actividades relacionadas con la comida y la bebida. Las despedidas de año, juntadas con amistades, festividades en general sin olvidar la noche del 24 y 31 de diciembre son precisamente esos momentos donde la salud puede entrar en jaque por excesos y desarreglos. Para evitar más de un dolor de cabeza, la nutricionista sanjuanina Ángeles Grassi comparte sus tips para implementar durante estas semanas.
“Prepararse para las fiestas no implica privarse o abstenerse de comida, porque uno tiene más seguido fiestas, juntadas o cenas de fin de año. Prepararse sería sostener una alimentación moderada y saludable”, señala la profesional.
Uno de los tips que comparte con sus pacientes es sostener la actividad física durante diciembre. De esa manera no solo se regula el peso corporal sino también la ingesta de alimentos, ya que el gasto energético es lo que demandará las calorías. “Si se trata de una persona que suele hacer actividad fascia, la recomendación es aumentarla, y quien no hace, es buen momento para comenzar a hacer. Si por ejemplo se está de viajes por vacaciones o visitando algún familiar, con salir a caminar es suficiente”, destaca.
Ser medido a la hora de elegir menú es otra de las recomendaciones. Esto implica no desbordarse el plato de comida o elegir opciones que sean muy pesadas, ya que, si la persona no está acostumbrada a comer de esa manera, el malestar puede hacerse presente, con molestias gástricas o tener la sensación de sentirse más pesado.
“Esta bueno que la gente entienda que por más que uno cene fuerte, es bueno comer moderado, comidas más livianas, que tengan verduras, frutas, basarnos más en las proteínas”, señala la licenciada Grassi.
Algo a tener en cuenta es no dejar de lado la sensación de saciedad. Esto implica por ejemplo no llegar con el estómago complemente vacío al momento de la cena, sobre todo para Navidad o Año Nuevo, donde en algunas familias existe la tradición de cenar luego de las 00 horas. La nutricionista sugiere que el día de la juntada, la persona procure no saltarse comidas, sino todo lo contrario, alimentarse de manera habitual, sumando proteínas que dan la sensación de saciedad. También ingerir mucha agua ayuda a la saciedad.
En caso de comer tarde, una colación previa ayuda mucho. Puede ser una fruta, un yogurt descremado o huevo revuelto, por mencionar algunas opciones válidas. Eso sí, hay que tener mucho cuidado con la colación previa y no caer en la tentación de los snacks procesados como papas fritas y similares, que no ayudan demasiado.
“Las distintas cenas se pueden disfrutar, pero hay que procurar ser moderados. Para el 24 y el 31 por ejemplo suele haber mucha variedad de comida. Una opción para moderarse es colocar de todo un poco en un solo plato de tamaño normal. Al ver el plato lleno, se puede saber qué se va a comer y las cantidades. Para que, entre todo en el plato, serán porciones pequeñas y es una buena estrategia”, sugiere Grassi.
Uno de los últimos tips que brinda la profesional es medirse con el consumo de bebidas alcohólicas y las gaseosas. Para ello, no hay que descuidar tomar agua “entre brindis”, para evitar la deshidratación; y en el caso de ser posible, elegir bebidas que no sean muy calóricas. Lo mismo sucede con los postres.
Teniendo en cuenta estos tips, sin descuidar la ingesta de verduras, frutas proteínas y cuidándose de los excesos, el “détox” post fiesta no será necesario y se podrá disfrutar de cada bocado sin culpa.