El 30 de junio del 2022 Sandra Barceló decidió ponerle punto final a su carrera en la política. Renunció tras dos años y medio en la Secretaría de Cultura de Capital y doce -en la gobernación de José Luis Gioja y Sergio Uñac- en la Secretaría de Industria. Fue una decisión muy meditada y que implicó un antes y un después: dejó la función pública para terminar de estudiar una maestría en la Universidad de San Andrés e inglés. No sabía lo que iba a venir pero se animó. Sin esperarlo recibió un ofrecimiento para gerenciar una empresa de transporte y logística. Hoy, está al frente de Pulmho Truck, donde busca darle una impronta distinta a una tarea siempre relacionada con los varones.
No fue sencillo tomar la decisión de alejarse de un mundo que manejaba muy bien. Tuvo la oportunidad de conocer al sector industrial, de conocer sus necesidades y demandas como así también de negociar con los empresarios del área en momentos complejos, como lo fueron los tarifazos y la liberación de las importaciones. Gestionar crisis, como le dicen ahora. Luego intentó ser candidata a intendenta de la Capital, pero finalmente declinó su candidatura y fue Emilio Baistrocchi quien encaró ese desafío en el 2019. Baistrocchi la incluyó en su gobierno y durante dos años estuvo a cargo de un área totalmente distinta a la que venía piloteando: la Secretaría de Cultura.
"Fue una decisión muy charlada con mi círculo íntimo. Mi hijo mayor se recibió de médico nefrólogo y se fue a vivir a Francia. Esa fue la mecha de pensar que quería hacer lo que tenía ganas. Fue muy difícil", apuntó Barceló. Cuando renunció a su puesto, decidió terminar de estudiar lo que había encarado en la Universidad de San Andrés. No tenía otros planes inicialmente. Hubo despedida en el palacio municipal, fue un punto final que la emocionó muchísimo y representó el mejor final.
Se recibió y a los meses tuvo una oferta laboral que no pudo rechazar. "Estaba con consultoría de empresas cuando recibí un ofrecimiento de la gerencia de Pulmho Truck. Me llamó la atención que los dueños son apenas un poco más grandes que mis hijos, de 30 y 33 años. Es una empresa de transporte y de logística, también estamos en vía de aprobar paquetería", explicó.
Al mismo tiempo, aseguró que le imprime su visión a la firma, en un rubro clásico de varones. En la mesa de decisiones de la empresa hay mayoría de mujeres y ahora está buscando incluir más mujeres choferes a los camiones. Su bagaje de experiencia en la gestión pública le permitió saber qué decir en ferias, escenarios posibles para conseguir nuevos clientes y hacerse conocer.
No está en los planes de Sandra volver a la política. Está muy cómoda con este nuevo desafío. "Hay vida después de la política", cerró.