Una familia de Rivadavia vivió un suceso insólito el martes 5 de julio. El hecho se dio cuando la familia llevó a castrar a su gatito de 8 meses, “Tom” y cuando lo retiraron se dieron cuenta que le entregaron otro felino. La preocupación duró tan solo unas horas. Luego de la nota publicada en Tiempo de San Juan, este miércoles los mininos volvieron cada uno a su casa.
Final feliz tuvieron los michis que luego de ser castrados fueron entregados a dueños distintos. En un principio, el hijo de una de las dueñas se dio cuenta de lo que había pasado. Cuando la familia llegó a la mesa de entrada de la Unión Vecinal Villa Seminario, en donde castraron a su mascota, plantearon la situación: les dieron el gato intercambiado.
En la mañana de este miércoles 6 de julio, la otra familia se comunicó con la unión vecinal y dio conocimiento del hecho. “Me contó la señora - la otra dueña- que también su hijo se dio cuenta pero como ya era de noche, esperaron al otro día”, contó Marianela Lara a Tiempo de San Juan. Finalmente se hizo el intercambio de mascotas.