La previa del show reunió a una multitud joven que no esquivó el glamour ni creatividad. Entre bandanas, tops metalizados, lentejuelas y camperas XL, el estilo urbano dominó cada rincón del Estadio del Bicentenario. Los seguidores de Nicki Nicole y Emanero marcaron tendencia con looks de pantalones cargo y maquillaje con glitter que brillaba bajo las luces de la FNS.
Pero el gauchaje también dijo presente, y fuerte. Los fanáticos de Soledad Pastorutti llegaron listos para una noche bien folclórica, con pañuelos al cuello, botas, fajas, sombreros y camisas que homenajeaban a la tradición. El aire se llenó de ese contraste perfecto entre lo moderno y lo tradicional. Entre mates, selfies y mucha expectativa, la moda fue foco de noche donde convivieron el pop urbano, el rap y el folclore más auténtico.