Mario Figueroa es uno de los pocos en San Juan que sigue esta profesión que viene de hace más de un siglo, lo heredó de su padre cuando tenía 10 años. Hoy con 54 es uno de los más buscados en San Juan. Distintos personajes de la provincia lo eligen a él para que deje sus zapatos como nuevos.
Pasaron 48 años desde que dicha labor lo eligió, él sigue con el mismo carisma que lo caracteriza y que hace que todos los días sus clientes se acerquen a la esquina de Mitre y General Acha.
Todos los tips los aprendió de su padre, el cual ahora abandonó el oficio. Junto con él y su hermano, que falleció hace unos años, salían casa por casa en busca de clientes. “Eran otras épocas. Nos pasábamos y lustramos ahí a los dueños de casa. Ahora no sé si eso pase”.
Es que actualmente, no hay muchos lustrabotas en San Juan debido a que ya no es una costumbre o necesidad que tenga la mayoría de la población como lo era antes. Los tiempos cambian. Pero afortunadamente a Mario esto no le afectó. “Mis clientes vienen siempre. Es un no parar toda la mañana”, respondió a Tiempo de San Juan mientras lustraba a uno de su clientela.
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Tantos años y sus clientes terminaron siendo una especie de amigos para él. La clientela la conforman trabajadores de bancos, oficinistas, abogados,hasta gobernadores. “Acá la gente viene porque está bien atendida. Mi comportamiento y el respeto, es fundamental”, añadió Mario. En pocas palabras, termina siendo como una especie de consejero. Se sientan en el atril, Figueroa comienza a lustrar y ellos a contar lo que vivieron en el día, hacen una catarsis.
Con él vive su esposa, su hija de 23 y su hijo de 19. El lustrabotas contó que la profesión que le heredó su padre llegó hasta él, sus hijos decidieron seguir otro camino. La más grande, profesora de baile arabae. Y él, terminando el secundario y es el 7 de Juventud Zondina.
Su jornada comienza a las 7 y termina a eso de las 13. Aseguró que esta es su vida, su pasión, la cual ni él sabe cuando va a dejar.
En los zapatos del otro: conoce al lustrabotas más buscado de San Juan