Luego de conocerse el preocupante caso de un alumno que ingresó al Colegio Fundación María Auxiliadora, de nivel secundario, de Capital con un arma de aire comprimido, el Ministerio de Educación de San Juan informó que está interviniendo en esa y otra situación de características similares registradas recientemente en instituciones educativas de la provincia, las cuales generaron gran preocupación en la comunidad escolar.
Desde el organismo emitieron un comunicado en el que se confirmó que ya está interviniendo tanto en el caso que trascendió este viernes como en otro similar. “El Ministerio de Educación de la Provincia informa que está interviniendo en las situaciones ocurridas en dos instituciones educativas de la provincia y que fueron difundidas por medios de comunicación”, indica el texto oficial.
“Como en cada hecho acontecido dentro de las escuelas, ya se activaron los protocolos correspondientes y, autoridades ministeriales, dirección de área, equipo supervisivo y gabinetes interdisciplinarios llevan adelante acciones concretas para garantizar el bienestar de los estudiantes y la comunidad educativa en general”, señalaron desde la cartera.
El Ministerio explicó además que el abordaje de este tipo de situaciones se realiza con “rigurosos protocolos que contemplan acciones pedagógicas, preventivas y de contención”, en base a los acuerdos de convivencia vigentes y dentro del marco legal, evitando la difusión pública de detalles específicos por tratarse de menores de edad.
“Formar a nuestros niños y adolescentes en el buen trato hacia el otro y en una sana puesta de límites es una tarea que se refuerza en las aulas y se complementa con la tarea de la familia”, agregaron.
Cabe recordar que, el hecho del alumno que ingresó al colegio con el arma trascendió después de que un grupo de madres y padres de estudiantes de sexto año elevó una carta formal a la Dirección del establecimiento para expresar su profunda inquietud ante un hecho que consideraron de “suma gravedad”. Según relataron los tutores, un alumno habría ingresado con un arma de aire comprimido, lo que representó un peligro concreto para la seguridad del resto de los estudiantes, así como del personal docente y no docente.
En la nota dirigida a las autoridades del colegio, las familias remarcaron que “un arma, aunque sea de aire comprimido, puede provocar daños severos o permanentes”, subrayando la seriedad de lo ocurrido. Si bien reconocieron que la institución actuó conforme a los protocolos establecidos por el Ministerio de Educación, consideraron que las medidas adoptadas resultaron insuficientes ante la gravedad del hecho y el fuerte impacto emocional que dejó en los alumnos.
Además, manifestaron su malestar por la falta de información clara sobre las acciones preventivas que se aplicarán para evitar que algo similar vuelva a repetirse. Indicaron también que muchos chicos siguen con miedo y se sienten inseguros frente a la posibilidad de que el estudiante involucrado sea reincorporado a las aulas sin una evaluación adecuada.
Por ello, solicitaron que se reforcaran las medidas de seguridad internas y que se evalúe cuidadosamente la situación del alumno en cuestión, priorizando la integridad física y emocional de toda la comunidad educativa.