El malestar por los altos costos en las facturas de energía eléctrica se extiende en San Juan. A los reclamos que surgieron la semana pasada en Iglesia, ahora se suman los vecinos de Calingasta, quienes denuncian montos desmedidos, recategorizaciones automáticas y el peso de los impuestos que encarecen aún más el servicio.
La situación es más grave en invierno, cuando la calefacción depende casi exclusivamente de la electricidad, en un sistema que los usuarios califican como “inestable”. Según afirman, entre el 40% y el 60% de lo que pagan en las boletas son impuestos, entre ellos el Cargo Único Municipal (CUM) y el canon de la red 512, que beneficia a empresas mineras.
El caso de Iglesia
En medio del descontento, el intendente Jorge Espejo confirmó que el CUM será eliminado en ese departamento. Sin embargo, aclaró que la medida no tendrá aplicación inmediata: primero se deben realizar modificaciones en la ordenanza y luego notificar a la empresa distribuidora Naturgy.
Mientras tanto, explicó que los costos del alumbrado público y de los edificios municipales pasarán a financiarse con fondos de coparticipación y algunos impuestos, aunque reconoció que lo recaudado con el CUM no alcanzaba a cubrir totalmente esos gastos.
El reclamo en Calingasta
Este miércoles, una delegación de vecinos de Calingasta tiene previsto llegar a la sede del EPRE en la capital sanjuanina para exigir explicaciones por los montos que consideran excesivos.
En este departamento, los comercios pagan el 10% de la boleta en concepto de CUM, lo mismo que las viviendas particulares. Ibazeta advirtió que, aunque eliminar el impuesto no es posible por falta de fondos, sí debería fijarse un tope en su cobro.
La propuesta consiste en que, si el alumbrado público ya se cubre con lo recaudado en los meses de menor consumo, no se cobre el impuesto extra cuando las boletas se disparan en invierno o verano. Ibazeta adelantó que buscará reunirse con los concejales para impulsar una modificación en la ordenanza, aunque reconoció que no será fácil debido a las tensiones políticas entre el Concejo Deliberante y el intendente Sebastián Carbajal.