Tal como lo había anticipado Tiempo de San Juan unos días atrás, se presentaron nuevos denunciantes en la justicia local para iniciar acciones legales contra la financiera Wenance -denunciada por estafa en todo el país- y los mismos no sólo apuntaron hacia los dos sanjuaninos que acá la representaban, sino también parecería ser que pusieron el ojo en una tercera persona.
Fuentes judiciales indicaron que a las cuatro acusaciones que se presentaron en un principio en la Unidad Fiscal del Sistema Mixto y que dieron origen a la causa se sumaron otras tres, impulsadas por damnificados que contaron cómo sus ahorros desaparecieron tras "invertir" en la empresa que se declaró en quiebra.
Con diferentes nombres aunque con historias similares, los denunciantes señalaron a los asesores financieros de la firma que tenían su oficina instalada en Rivadavia, Agustín Graffigna y María Fernanda Moreno Palacio, al igual que al dueño de la empresa que está en boca de todos, Alejandro Muszak. No obstante, no fueron los únicos que aparecieron en las nuevas denuncias.
Es que en ellas apareció el nombre de Felix Farías, a quien identificaron como un empleado de la sucursal de Wenance en San Juan, conocida como Big Capital. Como en la denuncia figura su identidad y detalla que el sujeto le informó al damnificado sobre los problemas de la financiera y que la misma ya no realizaría los depósitos, no está claro por el momento si puede ser un tercer imputado, o no, y todo ello quedará a consideración de la fiscal y la jueza que intervienen.
Es por eso que la titular de la UFI, Claudia Salica, realizó el requerimiento de investigación para que la jueza del Segundo Juzgado de Instrucción, Irene Mabel Moya, investigue a fondo las nuevas denuncias por estafa, las cuales en total superan los 6 millones de pesos.
Los damnificados están representados por el abogado Gustavo De la Fuente, quien acompañó a sus clientes a la sede judicial para radicar las acusaciones y que la supuesta estafa piramidal que dejó miles de víctimas, en todas las provincias, incluso en Uruguay y España, sea esclarecida.
Cuando la bomba explotó allá por julio de este año, se hablaba de unos 80 afectados en San Juan. Sin embargo, con el paso del tiempo se fueron sumando más sanjuaninos decididos a judicializar su situación con el objetivo de que los responsables sean castigados.
Acorde manifestaron las fuentes consultadas, los imputados que residen en la provincia ya fueron indagados en el Segundo Juzgado de Instrucción. No obstante, desde su entorno aseguraron que eso no es cierto y que no han sido llamados por la jueza.
Mientras tanto, desde la parte denunciante destacan su rol de partícipes necesarios en la comisión del delito. "Aunque la cabeza de la organización es Muzsak, ellos fueron fundamentales para que la gente confiara y pusiera su dinero", resaltó De la Fuente.
Los ahorristas están desesperados y pretenden recuperar el dinero que invirtieron, con la esperanza de obtener una tasa mayor a la que ofrecían fondos de inversión común o plazos fijos bancarios. En San Juan hubo quienes pidieron préstamos para formar parte del negocio y obtener alguna ganancia, mientras que otros vendieron propiedades a su nombre para participar de la propuesta que hacía Big Capital en nombre de Wenance. Lamentablemente, se quedaron con las manos vacías.