El escándalo crece y aparecen nuevos damnificados por las presuntas estafas, que se estima es multimillonaria, con la venta de lotes y que involucra a tres empresarios de familias reconocidas de San Juan. Hasta la fecha hay alrededor de 100 denuncias y van en aumento, al punto que los investigadores de la UFI Delitos Informáticos y Estafas entregan turnos para atender a las posibles víctimas.
Los principales sospechosos son Héctor Andrés del Valle Storniolo y Juan Mauricio Gallerano La Hoz, actualmente alojados en el penal de Chimbas. La jueza de garantías Flavia Allende dispuso el sábado último la prisión preventiva para ambos por el plazo de 30 días, mientras los investigan por estafas reiteradas. La otra implicada es Patricia Alejandra Nacif, esposa de Storniolo, quien es socia de los dos hombres en las firmas inmobiliarias Tramonto, El Nido Construcciones y Casa Noble, que comercializaban lotes en los complejos habitacionales Tierras de Don Rogelio, Tierras del Sur, Vistas del Sur y Las Acacias en Pocito.
Muchas familias depositaron sus sueños en esos proyectos inmobiliarios y sacaron sus ahorros, se endeudaron con préstamos y hasta entregaron vehículos para comprar los lotes que vendían a un precio de entre 6 y 12 mil dólares. Hay gente que compró su terreno en 2017. Otro de los denunciantes pagó 40 mil dólares en efectivo por 4 lotes, en marzo de este año.
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Este es Tierras de Don Rogelio, en Pocito.
Storniolo, Gallerano y Nacif junto a sus empleados, porque poseían oficinas y gente que ofertaba los terrenos, prometían a todos entregarles las propiedades en el plazo de 6 a 18 meses, ya urbanizado, con los servicios y la escrituración de cada parcela. Ahora bien, no cumplieron con nada de eso. Al menos eso señalan los denunciantes.
En principio, los empresarios justificaron que la demora en la instalación de los servicios era consecuencia de la pandemia. Después fue por la crisis económica y en el último tiempo culparon a OSSE, a las otras empresas distribuidoras y hasta la unión vecinal de la zona.
Lo que los empresarios nunca explicaron a los compradores fue que esos predios no estaban ni siquiera a nombre de sus empresas inmobiliarias y no podían venderlos porque no contaban con los papeles legales. Por ejemplo, los terrenos de Vistas del Sur pertenecen al padre de Gallerano, pero falta hacer el juicio sucesorio y la trasferencia para recién ahí poder disponer con esos terrenos.
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Patricia Nacif, Juan Gallerano y Héctor Storniolo, los tres imputados.
En el caso de Tierras de Don Rogelio, todavía es propiedad de una familia de apellido Colpas. Storniolo y Nacif prometieron a estas personas que les pagarían con 7 casas construidas en el mismo predio, a cambio de todo el terreno. Sólo levantaron una vivienda y con muchas fallas, de modo que los Colpas no entregaron legalmente toda la propiedad, según las versiones judiciales.
Las fuentes señalaron que el mismo problema se presenta en los otros dos proyectos inmobiliarios. Inclusive, los planos con la división de lotes y la urbanización son provisorios y no contaban con autorización oficial. Sin embargo, los empresarios comercializaban los lotes como si todo estuviese aprobado.
Durante la audiencia del sábado último, la ayudante fiscal Milena Barberi y los fiscales Eduardo Gallastegui y Pablo Martín expusieron que la imputación inicial está respaldada por 35 denuncias. El denominador común es que, sabiendo que no podían vender esos lotes porque no contaban con la documentación necesaria, lo hicieron durante todos estos últimos años y hacían promesas que no podían cumplir, señalaron. Existen constancia que los comercializaron hasta la semana pasada.
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La ayudante fiscal Milena Berbari junto con los fiscales Pablo Martín y Eduardo Gallastegui.
Contando únicamente con esas primeras 35 denuncias, estimaron que la presunta estafa ascendería a 300 millones de pesos. Pero esto recién empieza y el fraude sería multimillonario. Fuentes judiciales señalaron que, además de las denuncias que reciben a diario en la UFI Delitos Informáticos y Estafas, entregaron turnos a otros posibles damnificados para atenderlos más adelante porque no dan abasto.
Por otro lado, hay presentaciones en la sección Estafas de la Central de Policía y las comisarías. Así, las denuncias llegarían a 100, pero esperan que aparezcan más. Porque habría víctimas que cayeron en estafas similares con la compra de lotes en otros proyectos inmobiliarios –fuera de los cuatro que figuran en la causa-, también vendidos por Storniolo y su mujer.