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SUSCRIBITERevocaron la prisión preventiva contra los tres policías de la Motorizada Nº2, imputados de apremios ilegales por una golpiza a un joven. Los liberaron, pero fijaron una perimetral de 2 km.
Los tres imputados. Estos son los cabos Diego Antonio Díaz Sanz y Leandro Emanuel Paredes y el Agente Fernando Antonio Aballay.
Los tres policías que son investigados por golpear y fracturarle la mandíbula en dos a un joven de Rawson, fueron liberados este viernes. La jueza del caso revocó la prisión preventiva que pesaba contra estos efectivos de la Motorizada Nº 2 de Rawson, pero ordenó que no se acerquen en un radio de 2 km a la víctima ni a sus familiares.
Los beneficiados con la nueva medida son los cabos Diego Antonio Díaz Sanz y Leandro Emanuel Paredes y el Agente Fernando Antonio Aballay, quienes están imputados de los delitos de apremios ilegales y lesiones graves. Los tres fueron detenidos el miércoles 11 de septiembre y después la jueza de garantías Carolina Parra dispuso la prisión preventiva para todos ellos por el plazo de 40 días. En la causa también intervino la defensora de Policías, Ana María Arias.
El fiscal Francisco Micheltorena y el ayudante fiscal Francisco Nicolía, de la UFI Delitos Especiales, los venían investigando desde el 19 de agosto pasado a raíz de la denuncia de una mujer que aseguró que estos policías detuvieron a su hijo en el interior del barrio La Estación. Creyendo que era un ladrón, los uniformados le dieron una paliza y le provocaron una doble fractura de mandíbula, además de otras lesiones, según la denuncia. La víctima padece de retraso madurativo y epilepsia.
El chico tendría antecedentes y aparentemente los uniformados pensaron que la bicicleta en la que se movilizaba era robada. Sin embargo, las primeras investigaciones demostraron que el joven no hacía nada y que el rodado que manejaba era un premio que había ganado el Día de las Infancias.
Ante la gravedad de los hechos y la posibilidad de que los policías interfieran con la investigación, la fiscalía pidió que los tres policías continuaran detenidos. La jueza, en principio, ordenó la prisión preventiva por el plazo de 40 días y los envió al penal de Chimbas. Sin embargo, la postura de los representantes del Ministerio Público Fiscal cambió y ahora estuvieron de acuerdo con la morigeración de las medidas coercitivas, tal como pidieron los abogados defensores Maximiliano Páez Delgado y Reinaldo Bedini.
Así, este viernes se realizó una nueva audiencia donde la fiscalía hizo saber a la jueza que desistían del pedido de la prisión preventiva. La magistrada hizo lugar al planteo y otorgó la libertad a los policías Díaz Sanz, Paredes y Aballay. Eso sí, les prohibió acercarse a la víctima y a sus familiares en un radio no menor a los 2 kilómetros, mientras avanza la investigación penal preparatoria por el delito de apremios ilegales y lesiones graves.