Su rostro era el de una persona aún nerviosa, pero sin arrepentimiento. Su bermuda, su chomba y sus manos estaban manchadas con sangre. Y él mismo confeso el asesinato: “Yo lo maté por violador … ese no viola más”, según un informe judicial.
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SUSCRIBITESe conocieron las imágenes de Antonio Molina, el hombre que atacó y mató a golpes a Manuel Ruiz Palma en una casa de Caucete. Por primera vez también se conoce el rostro del ahora fallecido.
Su rostro era el de una persona aún nerviosa, pero sin arrepentimiento. Su bermuda, su chomba y sus manos estaban manchadas con sangre. Y él mismo confeso el asesinato: “Yo lo maté por violador … ese no viola más”, según un informe judicial.
Así encontraron a Antonio Solano Molina Varela, el homicida de Caucete, el sábado a la noche. Las fotos que trascendieron este domingo, muestran al hombre después de que lo detuvieran en la vereda de su casa en la manzana 14 del barrio Ruta 20. Minutos antes había asesinado, de forma traicionera y alevosa, a Manuel Eduardo Ruiz Palma con un caño galvanizado.
Los primeros policías que llegaron al lugar encontraron a Ruiz Palma tendido, con el rostro y la cabeza empanados en sangre y sin signos vitales en un pasillo lateral de la propiedad y contra un portón de chapa. En esa vivienda viven a Antonio Molina, de 40 años, y su pareja Gilda Flores y sus hijos.
Tal como adelanto TIEMPO DE SAN JUAN, el móvil del crimen fue el de la venganza por un abuso sexual. Esa es la teoría que barajan los investigadores que trabajan bajo las órdenes del fiscal Francisco Micheltorena junto con los ayudantes fiscales César Recio, Adrián Elizondo y Agostina Ventimiglia de la UFI Delitos Especiales.
Según fuentes del caso, todo vino por un abuso sexual ocurrido días atrás y que habría cometidoRuiz Palma contra un miembro de la familia. El hombre de 61 años era la pareja de Silvina del Valle Flores, madre de Gilda Flores.
La primera que tomó conocimiento sobre el abuso fue la joven, quien habló con Molina el día viernes y le puso al tanto de todo. Eso supuestamente enfureció al hombre de 34 años, que se propuso hacer justicia por mano propia.
La sospecha es que era tanta la bronca de la joven y Molina, que ambos planearon vengarse del hombre mayor. Fue así que ese mismo viernes aparentemente llamaron a Silvina Flores –la mamá de Gilda- y la invitaron a cenar el sábado por la noche. Por supuesto, le dijeron que fuese acompañada de Manuel Eduardo Ruiz Palma.
El hombre mayor y Silvina Flores fueron a la cita al barrio Ruta 20, pero llegaron acompañados por Rubén Darío Aldana y a Natalia Castro, una pareja amiga. Eso fue pasadas las 21 del sábado. De acuerdo a los testimonios que recogieron los investigadores, Gilda Flores y Antonio Molina recibieron amablemente a las dos parejas y las invitaron a sentarse alrededor de la mesa del comedor.
En esos momentos, la joven de la casa se llevó a los niños a una habitación. Antonio Molina, que estaba parado detrás de Manuel Ruiz Palma, esperó que cerraran la puerta. Y cuando se cercioró que su pareja y sus hijos se encontraban dentro del dormitorio, sacó el caño metálico y empezó a atacar a golpes al hombre de 61 años.
Le pegó en la cabeza y en el rostro. Rubén Darío Aldana y Natalia Castro trataron de detener a Molina, pero ahí ligaron algunos golpes y entonces escaparon, según las versiones. También dijeron que Gilda Flores regresó al comedor y agredió a su madre. Mientras tanto, Ruiz Palma corrió herido hacia el patio lateral de la vivienda, pero fue perseguido por el dueño de casa, que lo golpeó hasta matarlo. Este último después se entregó cuando llegó la Policía. Su pareja también quedó presa.