A más de una semana de quedar internado en Terapia Intensiva Pediátrica, del Hospital Rawson, el bebé de tres meses que cayó dentro de un brasero y producto de ello quedó grave evolucionó favorablemente y pasó a Terapia Intermedia, luego de que le quitaran el respirador artificial.
El chiquito oriundo de Valle Fértil, que se quemó la cara, una mano y tuvo comprometida sus vías respiratorias por la inhalación de monóxido de carbono, se recuperó y por ello sería trasladado al Servicio de Quemados del Hospital Marcial Quiroga para continuar con la curación de sus heridas.
Afortunadamente, el pequeño que estaba grave y luchaba por su vida mejoró su estado, por lo que fuentes oficiales del nosocomio indicaron que la criatura podría ser derivada el miércoles mismo. Acorde a la información que manejan fuentes allegadas al caso, el bebé estaría acompañado por su madre ya que los únicos familiares que pueden acompañar a un menor en Terapia son los directos como el padre o la madre.