“No soy una estafadora ni lucro con tarjetas de planes sociales… No soy puntera política. Gracias a Dios no tengo nada que ver con la política. Pueden sospechar que hay algo turbio, pero no lo hay. Soy una comerciante que da crédito a personas que confían en mí y me dan su tarjeta para que me cobre sus deudas”. Así salió a defenderse la mujer que cayó presa este viernes mientras retiraba dinero de un cajero de Rawson y que tenía en su poder más de 50 tarjetas de débito, la mayoría de planes sociales, y cerca de 200 mil pesos en efectivo.
Su nombre es Delia Lidia Tevez, de 50 años, y quedó detenida por orden del juez del Tercer Juzgado de Instrucción ante la sospecha de que estuvieran frente a otro caso de estafa a beneficiarios de planes sociales. Más teniendo en cuenta el caso que se destapó en noviembre pasado y por el cual hay a cinco personas acusadas de retener tarjetas de planes sociales de otras personas y quedarse con gran parte de su dinero.
Tevez es dueña de la tienda de ropa “El Porteñito” de Villa Krause y andaba en una Toyota Hilux. Una persona llamó a la Policía cuando vio que la mujer operaba en los cajeros automáticos con varias tarjetas, el viernes pasada la 1.30. Al arribar los uniformados, descubrieron que Tevez poseía 40 tarjetas de débito del Banco Nación y San Juan. También le hallaron cerca de 200 mil pesos –en principio, dijeron 135 mil-, entre el dinero que portaba ella y lo que encontraron en su camioneta 4x4, según confirmó ella misma. En el vehículo había otras 15 tarjetas, algunas del plan Ellas Hacen, de otras de planes sociales y hasta de pensiones y sueldos, reconoció la comerciante.
En la Policía surgió la sospecha de que estarían frente a una puntera política o una estafadora y quedó detenida en la sección Defraudaciones y Estafas de la Central de Policía. De hecho, secuestraron su camioneta. Después allanaron su casa en el Bº Los Plátanos, en Rawson, y su negocio en el Bulevar Sarmiento en Villa Krause. “Se llevaron hasta el dinero de la recaudación de la venta de mi local de ropa”, se quejó Tevez, quien luego quedó con prisión domiciliaria en su casa a raíz de una enfermedad que padece.
Frente a tamaño escándalo y al quedar bajo sospecha, Tevez habló en exclusiva con Tiempo de San Juan. “Estoy mal porque me escracharon, me hacen ver como que soy una estafadora. Fui muy maltratada por la Policía, que me detuvo y me humilló. Hay una confusión, no engaño ni me quedo con la planta de nadie”, aseguró la mujer, que afirmó que su única actividad es la de comerciante y que con eso mantiene a sus dos hijos.
“No soy puntera política. Gracias a Dios no tengo nada que ver con la política, todo me lo gano trabajando. La Política no me dio nada, no estoy metida con ningún político. Mi negocio está todo en regla”, aclaro, a la vez que explicó que “esto lo hago desde hace años y no lucro con la gente. No obligo ni extorsiono a nadie. Yo doy crédito. Y los clientes, como garantía, me dejan su tarjeta para que pueda cobrar lo que me deben. Es eso nada más. Hay gente que aparece en el Veraz o no puede comprar en crédito en otras tiendas. En cambio, yo les doy créditos para que puedan vestir a toda su familia y me pagan en cuota”.
La comerciante reconoce que “no es lo correcto como trabajo, pero es la manera de asegurar mi bolsillo. Lo hacen voluntariamente. Nunca he retenido una tarjeta a la fuerza. Es como un trato que hacemos con el cliente y lo hacen porque me vienen a pedir fiado, además surge de la confianza. Los conozco a todos y es una forma de ayudarlos y yo vendo. Acá no hay ninguna estafa ni hay ninguna comisión aparte. La ropa tiene precio, en efectivo, y con tarjeta otro, sea de débito o de crédito. Se les pone un porcentaje como hacen todos, más si compran en cuotas”, expresó.
Así, lo que dice es que hay un acuerdo con sus clientes, quienes les dieron la tarjeta de débito para que ella cobre a través del cajero y se quede con el dinero que adeudan. “Solo cobro lo que me deben. A veces me dejo tres mil y les entrego los siete mil restantes al cliente. Es de acuerdo al porcentaje que me deben, pero les doy su vuelto. Es un favor mutuo. No hay nada turbio”, aseguró Tevez, quien dijo que pronto todo se va a aclarar. Según ella, ya fueron a declarar cuatro de sus clientes, quienes respaldaron sus dichos. Lo cierto es que ella continua con prisión domiciliaria y la siguen investigando.