Barrick anunció la firma de un acuerdo que pone fin al conflicto más complejo que enfrentó en sus 30 años de presencia en África. La minera canadiense y el Gobierno de la República de Mali alcanzaron un entendimiento que pone fin a todas las disputas vinculadas a la operación Loulo-Gounkoto, el principal complejo aurífero del país.
La compañía minera canadiense pagará 430 millones de dólares para resolver la disputa que mantenía con el país africano sobre la propiedad de las minas de oro, señaló este martes Bloomberg.
El impacto del acuerdo entre las partes es inmediato: el gobierno de Mali retirará todos los cargos contra Barrick, sus filiales y empleados, y se iniciarán los trámites legales para la liberación de los cuatro trabajadores detenidos desde hace meses. Eso incluye la orden de detencion que pesaba contra el ex CEO Mark Bristow.
Además, el gobierno se comprometió a finalizar la administración provisional que había impuesto sobre el complejo, devolviendo a Barrick el control operativo pleno de la mina. De esta forma, la minera que opera la mina Veladero, en San Juan, junto a la china Shandong Gold, vuelve a la producción de oro en el país africano.
Como parte del acuerdo, la empresa retirará también las demandas de arbitraje internacional que había interpuesto ante el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones (CIADI).
El origen de un conflicto enorme
- La disputa entre Barrick y Mali había escalado de manera excepcional desde finales de 2024. El origen estaba en la decisión del gobierno de Mali -conducido por la junta militar- de exigir mayores beneficios del sector minero en un contexto de alza del precio del oro. Para lograrlo, buscó aplicar de manera retroactiva nuevas regulaciones, pese a los acuerdos ya vigentes con la compañía.
- Barrick sostuvo entonces que estas medidas no solo violaban la seguridad jurídica, sino que representaban un quiebre en casi tres décadas de asociación. El gobierno, que posee el 20% del complejo Loulo-Gounkoto, ya había recibido, según la minera, la mayor parte de los beneficios económicos generados por la operación.
- En enero de 2025 la situación se tensó al máximo: Mali bloqueó la exportación del oro producido e impuso un embargo provisional sobre las existencias en mina. La compañía advirtió que, de prolongarse la medida, se vería obligada a suspender sus operaciones, afectando a más de 8.000 empleados y proveedores locales.
Detenciones, alarma y al final un acuerdo
El conflicto tomó un giro más grave cuando varios empleados de Barrick fueron detenidos sin fundamentos claros, según denunció la empresa. Incluso se emitió una orden de arresto contra el entonces CEO global de Barrick, Mark Bristow, un hecho sin precedentes para una minera de esta escala.
Con el nuevo acuerdo ambas partes buscan recomponer la relación y garantizar la continuidad del complejo Loulo-Gounkoto, uno de los activos de oro más importantes de África y fundamental para la economía de Mali.
Barrick destacó en un comunicado oficial que la resolución abre “un camino constructivo” para redefinir la asociación y, eventualmente, mejorar la participación estatal de manera negociada y conforme a los marcos vigentes. La empresa remarcó además su compromiso histórico con el país, donde opera desde hace casi tres décadas