En la última hora del miércoles, el presidente Javier Milei brindó una entrevista radial con un amplio temario, en el que se refirió al vínculo con Estados Unidos, hizo una extraña comparación y volvió a bancar a José Luis Espert en medio de la polémica por sus supuestos vínculos con el narcotráfico.
Antes de su nuevo viaje para reunirse con Donald Trump, Milei habló en radio Mitre sobre el vínculo que viene construyendo con el secretario del Tesoro norteamericano, Scott Bessent, a quien comparó con Lionel Messi por su capacidad y comprensión del funcionamiento económico global. Destacó el respaldo recibido y explicó que se está avanzando en un programa financiero con tres ejes: liquidez vía swap, compra de títulos en el mercado secundario y adquisición de deuda en el mercado primario.
Milei también se refirió a la “muralla” que busca construir sobre la economía argentina para evitar que, según sus palabras, “los que hacen daño” vuelvan a perjudicar al país. En ese marco, defendió su programa económico y dijo que, si cumple el “contrato con la gente”, tiene todo para aspirar a un segundo mandato.
Respecto al escenario electoral y político local, calificó el año como “un infierno” y señaló que tanto parte de la oposición como algunos aliados se ven forzados a acentuar diferencias por la dinámica electoral. Sin embargo, afirmó que se están construyendo consensos para avanzar con reformas estructurales, en coordinación con gobernadores, el ministro Luis “Toto” Caputo y hasta con el propio Mauricio Macri, con quien dijo mantener una relación cercana.
Y en ese contexto se refirió también al caso de Espert (señalado por supuestamente haber recibido dinero del narco Fred Machado). Al respecto, advirtió: “De ninguna manera pensé en correrlo -de la candidatura legislativa-. Es un refrito de una operación del 2019. Espert pudo ser candidato en el 2019, en el 2021 y estuvo en el armado de Larreta en 2023”.
En lo económico, admitió que el 31% de pobreza es una cifra “aberrante”, pero la atribuyó a “100 años de decadencia”. Proyectó que, si continúa su plan, en diez años Argentina podría estar como España y en veinte como Alemania. Además, reiteró que para mediados de 2026 la inflación podría desaparecer, lo que permitiría comenzar a reducir impuestos.