La venta de propiedades no está atravesando su mejor momento pero dentro del sector han notado un leve repunte en algunas operaciones en particular. Son aquellas compras de bienes de menos de 10 millones de pesos. A pesar de no haber circulante de dinero, todos aquellos que cobran herencias o indemnizaciones optan por invertir en la compra de lotes, monoambientes o departamentos de una habitación.
El presidente del Colegio de Corredores, Pablo Domínguez, informó que aquellas personas que se encuentran con algún cobro inesperado invierten en bienes porque es la “única forma de que no se les devalúe” lo recibido. La inflación, la incertidumbre y las dificultades para resguardar el dinero en dólares son las causas que llevan los sanjuaninos a comprar departamentos y lotes.
El repunte no se ve reflejado en otro tipo de operaciones, como viviendas más grandes y de mayor precio. Este tipo de ventas permanece estacado en contraposición con lo que sucede con los alquileres.
Domínguez dijo que siguen con la lista de espera para rentar departamentos de una o dos habitaciones. “Hay faltante, sigue esperando la gente que se desocupen departamentos y son ocupados rápidamente”, añadió. Con las casas pasa lo mismo, sobre todo con la minería, que viene rentando casas de categoría, con alquileres de más de $100.000.
En cuanto a los precios, están casi todos dolarizados pero las operaciones en general se terminan concretando en pesos.
Tanto en Capital Federal como en Provincia de Buenos Aires las operaciones de venta registraron un leve incremento, pero no alcanzan a mejorar el mercado, que se encuentra estancado. Además de la inflación, otro de los grandes problemas para el acceso a la vivienda es la imposibilidad de conseguir créditos hipotecarios. A esto se le suma la capacidad de ahorro de los argentinos, que viene en caída libre.