La declaración de dos dirigentes puso al rojo vivo el escándalo que atraviesa hoy el Club Sportivo Peñarol y que tiene en el ojo de la tormenta a Oscar Cuevas, el presidente con mandato vencido. Ahora se conoció que a raíz de la denuncia penal de un grupo de socios por presunta malversación de fondos y el testimonio informativo de un grupo de personas, la Justicia allanó la Secretaría de Deportes y no descartan involucrar a la Asociación de Fútbol Argentino en la investigación.
Por pedido del Segundo Juzgado de Instrucción que dirige la jueza Mabel Moya, en las últimas horas se secuestraron varios documentos del ente gubernamental que tienen que ver con el dinero que le vienen otorgando al club bohemio, en concepto de subsidio, por su participación en el Torneo Federal A. Es que justamente uno de esos subsidios es el que desató la investigación y la puja entre dirigentes de la comisión directiva. Se trata de casi 9 millones que Cuevas retiró de las arcas del club en el mes de abril y luego no rindió.
También se allanaron las oficinas de la Dirección de Personería Jurídica.
Según explicaron fuentes judiciales, el allanamiento se ordenó a partir de una serie de incongruencias en las testimoniales que hubo hasta el momento. Todos estos testimonios se dieron en calidad informativa, aunque a raíz de la investigación que lleva adelante la Fiscalía para algunos podría cambiar la calificación: de informativa a indagatoria, siendo ya sospechosos de delito.
Por ahora no encuentran una prueba que avale lo que dice una parte, los socios y parte de la CD, y lo que declaró Oscar Cuevas. Lo que sigue ahora es analizar los documentos secuestrados. No descartan pedir informes a la casa madre del fútbol argentino ni citar a sus dirigentes (cabe destacar que su presidente es el sanjuanino Claudio "Chiqui" Tapia).
Pero la investigación que lleva adelante la fiscal Claudia Salica no termina ahí, con el destino del subsidio que entregó en abril pasado el Gobierno provincial y fue retirado por Cuevas, sin la firma de los demás dirigentes. Es que la Justicia también investiga el destino de 12 millones que la AFA habría depositado al club y otro millón que habría ingresado en concepto de televisación. Lo polémico es que ese dinero no habría ingresado a la cuenta bancaria de la institución chimbera, sino a una personal que está a nombre de Cuevas.
Por ahora todos están en la mira de la Justicia. A esto se suma lo deportivo, con Peñarol último en la tabla de posiciones en zona de descenso, y los problemas institucionales y económicos. Este miércoles, el tesorero Miguel Riveros le solicitó a la Justicia poder desbloquear la cuenta bancaria del club para pagar sueldos y demás compromisos que tiene el club (están retenidos 8 millones de pesos de otro subsidio). Esto fue rechazado. Explicaron que hasta que no haya una nueva comisión directiva, que demuestre capacidad administrativa, la cuenta seguirá bloqueada.