Darío Ramella cambió de rumbo otra vez. Después de haber gritado campeón en Australia con el Sorrento Fútbol Club y de haber llevado una vida entre el fútbol y un trabajo en un local comercial, el lateral izquierdo nacido en Sportivo Desamparados dio un salto hacia Europa. Ahora viste la camiseta del CF Montañesa , un histórico de Barcelona que milita en la Tercera Federación del fútbol español, la quinta categoría en el sistema de ligas, que reúne 324 equipos distribuidos en 18 grupos.
“Estoy contento, tenía ganas de cambiar de aire de lo que era Australia. Acá la cultura es más parecida a la argentina, me siento más en casa”, comentó de antemano Ramella a Tiempo de San Juan. El sanjuanino llegó a España tras tomar una importante decisión personal: “Conocí a mi novia en Australia, ella es argentina pero se venía a vivir a España. La relación fue creciendo y me parecía buena idea. Tenía ganas de venirme y solicité una visa de trabajo por un año. Hablando con un representante conseguí club en poco tiempo”.
Su nuevo club, fundado en 1927, juega en el Camp Municipal de Nou Barris, un estadio con capacidad para 2.500 personas.
La propia institución anunció su incorporación a través de las redes sociales. “Presentamos a Darío Ramella como nuevo jugador de la Monta para cerrar la banda izquierda y darle nivelazo”. La llegada del sanjuanino se dio tras la baja de un jugador clave, lo que obligó al entrenador a improvisar en defensa. Con él, el equipo suma un zurdo natural para ese sector.
Su nueva vida en España, reconoce, también es un desafío fuera de la cancha. “Las primeras semanas fueron mucho de trámites, trabajo, club. Estoy en ese proceso. Ella tiene ciudadanía italiana y si queremos quedarnos a largo plazo, podemos solicitar pareja de hecho. Eso nos da más estabilidad”, cuenta.
Ramella, que pasó por Desamparados y Peñarol antes de emprender su aventura internacional, había dejado San Juan en 2022 rumbo a Australia. Allí jugó en Melbourne y luego en el Sorrento, con el que consiguió un ascenso y un título en la Primera División de Western.
Hoy, instalado en Barcelona y con la ilusión de dejar su huella en el fútbol español, abre otro capítulo en su carrera. “Estoy recién adaptándome, pero feliz. Es un paso que quería dar y ojalá pueda aprovecharlo al máximo”, dice.