Este lunes, en la puerta de la casa de su hermana (Mitre y Ameghino), al deportista sanjuanino Karim Adarvez le secuestraron de su auto un bolso amarillo fluorescente marca Adidas, en el que tenía dos costosos judogi con los que compite y entrena.
En el bolso, con colgante negro, llevaba los dos únicos equipos de judo de color azul y además elásticos de entrenamiento, ropa y un celular.
En su página de Facebook, el atleta escribió lo siguiente después del desafortunado hecho.
"Es para mí muy importante que si a alguno de mis contactos de Facebook les ofrecieran un judogi, se comunicaran conmigo. Mi única intención, y no cabe otra entre mis pensamientos, es recuperar lo que es tan valioso para mí, y que tanto esfuerzo me costó para obtenerlo. El Judo tiene códigos morales que quién alguna vez ha conversado con algún Judoka va saber reconocer entre ellos (la educación, el coraje, la sinceridad,y el respeto entre otros...), solo pido que se tengan en cuenta al momento de actuar, porque sin ellos presentes se altera el orden de la vida, que puede causar un daño en el que en algunos casos, como éste puede ser reparable, pero en otros irreversibles. Voy a estar muy agradecido a quién aporte humildemente un dato, y esperaré que el camino haga lo suyo".