Por Luz Ochoa
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Alguna vez lo dijo Diego Latorre: "Boca es un cabaret", en un momento de calentura cuando éste todavía era jugador de fútbol. Sin importar el tiempo, la frase quedó en la memoria de la gente y, cada vez, que ocurría algún conflicto en Boca, era oportuno sacarla a relucir.
En la actualidad, el conjunto xeneize pasa por un buen momento, en cuento a lo futbolístico, ya que es el último campeón argentino y que volvió a jugar la Copa Libertadores. Sin embargo, los problemas internos entre jugadores y el dt rompen con la estabilidad que parecía tener.
Luego del empate de un desconocido Boca ante el Zamora, por el campeonato continental, uno de los mayores referentes del plantel, Juan Román Riquelme, habría tenido un cruce dialéctico con el entrenador Julio César Falcioni.
Ni bien el equipo arribó a Ezeiza, un gran número de periodistas los aguardaba para obtener alguna declaración. En ese instante, el técnico decidió guardar silencio, mientras que el enganche negó cualquier tipo de especulación.
La novela de Boca continúa, cambian los protagonistas, pero el escenario sigue siendo el mismo. Preparen los pañuelos que se viene lo mejor..
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