miércoles 22 de noviembre 2023

Alcanzaste el límite de 40 notas leídas

Para continuar, suscribite a Tiempo de San Juan. Si ya sos un usuario suscripto, iniciá sesión.

SUSCRIBITE
#8M

Cuando vender tu cuerpo parece la única salida: historia de una mujer trans que dejó atrás la prostitución

Cintia Suárez se dedicó al trabajo sexual durante 16 años viviendo muchas situaciones que prefiere dejar en el olvido. Con un presente diferente, comenta cómo fue dejar las calles.

Por Redacción Tiempo de San Juan

Fueron muchos años en la calle ofreciendo su cuerpo a cambio de dinero como trabajadora sexual, una labor que no está reconocida en nuestra sociedad como trabajo, y que si bien hay mujeres que lo ejercen por voluntad propia, en la mayoría de los casos llegan a ese lugar como última opción, último recurso para poder sobrevivir y tener un ingreso económico. Eso fue lo que empujó a Cintia Jenifer Suárez a ser trabajadora sexual durante 16 años.

Cintia, alias “La Coco”, como la conocen dentro del ambiente artístico, se autodefine como “toda una hembra”, mientras se acomoda en el sillón que ocupa durante las horas de su nuevo trabajo. Con 33 años repasa junto a Tiempo de San Juan su vida, aquel pasado que la marcó y el cual dejó atrás, ya que hace cinco meses decidió dejar de ejercer la prostitución.

“Comencé a transformar mi cuerpo en un momento en donde la discriminación era terrorífica. Tenía 15 o 16 años y no podía ocultar mi sexualidad. A los 18 quedé en situación de calle, en parte porque mi familia no daba lugar a la persona que soy, y en parte porque ya no me sentía cómoda. Fue una decisión, ya que mi deseo de cambiar mi cuerpo, de ser mujer era muy grande y necesitaba dinero para las cirugías. Para una mujer trans no es fácil conseguir trabajo, mucho más en aquel momento, por lo que no tuve otra alternativa para generar dinero que con la prostitución”, comenta La Coco. Fue así que comenzó a ofrecer servicios sexuales.

La búsqueda de trabajo en algunos casos suele ser difícil, pero lo es en manera generalizada para las chicas trans. Coco destaca que por su condición nadie le daba trabajo. “Fui trabajadora sexual porque no me quedaba otra”.

Reconoce que el haber estado en las calles tantos años genera problemas a nivel psicológicos, y no es para menos cuando entre sus recuerdos están las cuatro veces que quisieron matarla solo por ser trans y prostituta, las veces que la agredieron verbalmente y los prejuicios de la sociedad simplemente por ser trabajadora sexual. “Hoy en día no quiero que me toque más nadie. Eso es algo que me quedó después de tantas experiencias y vivencias de distinto tipo”, resalta. Si bien siempre hubo cuidado mutuo con el resto de las trabajadoras con quienes compartía la labor, a veces evadir el peligro en ese tipo de situaciones es más difícil de lo que parece.

Ser trabajadora sexual no solo pone en jaque la salud mental y la seguridad de quien lo ejerce, sino también la vida social. Establecer relaciones sexo – afectivas puede ser complicado si desde el otro lado no se comprende que se trata de un trabajo. Jenifer resalta que eso fue lo primero que le dijo a su pareja, con quien lleva 3 años de relación.

Tras 16 años de ejercer la prostitución, Coco recuerda cuál fue el momento en donde decidió dar un giro a su vida. “Me sumé al grupo de Cultura Drag. Siempre me gustó la danza y todo ese brillo alrededor de las vedettes. Trabajaba con ellos y me convocaban a presentaciones o distintas intervenciones. En un momento salió un viaje a Tucumán, donde fui representando a San Juan como Primera Vedette. Allá vi lo hermoso que es trabajar y ganarse la vida con el arte. En ese momento dije que no quería más la prostitución para mí. Incluso no atendía el teléfono, porque era una decisión tomada”.

La Coco junto al team de Cultura Drag 

Fue así que hace cinco meses el trabajo sexual forma parte del pasado de Coco. A partir de ese momento cada propuesta que ha ido surgiendo le han cambiado definitivamente la vida, ya que hace aproximadamente dos meses trabaja como model webcam para Belle Argentina, empresa sanjuanina que se dedica a la venta de contenido erótico, desde la premisa de la inclusión y dignificación del rubro. “Me encuentro en un lugar muy cómodo, dónde me cuidan un montón y puedo crecer no solo a nivel personal y profesional, sino también económico. Me gusta porque puedo ser yo, estar todo el tiempo arreglada mostrando la mujer que soy, pero sin los riesgos y los peligros que tenía en la calle”, comenta.

Parada desde el otro lado de la vereda afirma que, si la sociedad le hubiera dado la oportunidad en su momento, habría estudiado psicología o abogacía, pero incluso hasta la educación parecía un lujo para una chica que siendo adolescente decidió dejar la escuela por la discriminación y las agresiones que sufría. Actualmente su realidad es otra, ya que está estudiando Administración Pública, pero la necesidad de una salida laboral rápida frenó muchas veces su deseo de ser profesional, algo que reconoce hoy no podría concretar si siguiera siendo trabajadora sexual.

Para “La Coco” un gran porcentaje de mujeres que ejercen la prostitución lo hacen porque no tienen más opciones. Destaca que, pese a que hay mayor aceptación de la población trans en la sociedad, aún falta más apertura de oportunidades laborales y de estudio. “No es común ver una chica o un chico trans en una oficina, por ejemplo. Incluso sería genial si el trabajo sexual tuviera una regularización y dejara de ser tan denigrante como lo es ahora, siempre y cuando las chicas quieran hacerlo”.

La autopercepción es muy importante. Cuando la sociedad tiene la apertura suficiente para comprenderlo la realidad de distintas personas puede ser completamente otra. Durante 16 años Cintia estuvo viviendo una vida que eligió, pero con las consecuencias dañinas de esa elección, simplemente porque el deseo de ser quien realmente sentía en su interior fue siempre mucho más grande que cualquier otra cosa, simplemente porque se sentía mujer. Hoy, gracias a las decisiones que tomó sin dejar de ser ella, afirma que no extraña para nada ser trabajadora sexual, si tiene muchos recuerdos de momentos con las chicas en la calle, o uno que otro cliente, pero “ni loca” volvería a ejercer la prostitución.

 

Tiempo de San Juan

Suplementos

Contenido especial

Seguí leyendo

Dejá tu comentario

LO QUE SE LEE AHORA
estas son las sanjuaninas que compiten para consagrarse en el certamen rostro y tacon

Las Más Leídas

ANSES sigue asistiendo a los sectores más vulnerables.
Calor, humedad, viento y ¿lluvias en San Juan? Imagen ilustrativa
Quiénes serán los nuevos ministros de San Juan, en un gabinete de 11
Un sanjuanino ganó uno de los premios del Telekino.
Marcelo Orrego definió más ministros y los dio a conocer este martes.

Te Puede Interesar