"Pasó por un montón de cosas. Un día estaba bien y el otro día estaba mal. En un momento nos dijeron que tenía 90% de mortalidad. Fue una experiencia muy difícil". Esas son las palabras de Maira Granados, la mamá de Benjamín. La joven, oriunda de Caucete, fue la fiel compañía que tuvo el pequeño en el Sanatorio Argentino, donde nació con 575 gramos y hoy recibió el alta con 2 kilos.
El caso de Benja fue uno de los más simbólicos del hospital privado. El menor nació con casi medio kilo y hasta llegó a pesar 395 gramos. Además tuvo que dar pelea a diferentes dificultades que iban surgiendo en su salud. "Tuvo tres infecciones y en la última me decían que habían pocas esperanzas. En el transcurso del tiempo que estuvo internado también sufrió una hemorragia en su cabecita de grado dos. Son cosas que pasan todos los bebés que están en neo. Pero gracias a Dios pudo salir adelante".
La mamá agradeció por la recuperación de su bebé a los profesionales del Sanatorio Argentino, también a todas las personas que oraron por él. "Resalto el trabajo de los médicos y enfermeros porque han sido excelentes profesionales y personas. Cuando yo decaía ellos estaban alentándome. Cuando las expectativas no eran buenas o le daban pocas esperanzas de vida, ellos contenían. Y también a todas las personas que sin conocerme me brindaron palabras de aliento", agregó.
Hoy Benja ya está en su casa, recibiendo todo el afecto de sus seres queridos.